Más de 60 mil mujeres mueren al año en España debido a alguna enfermedad cardiovascular, según los datos disponibles del Instituto Nacional de Estadística (INE). Como recoge la Sociedad Española de Cardiología (SEC) esto supone que cada ocho minutos muere por esta causa una persona del sexo femenino. Sin embargo, pese a ser la principal causa de muerte en mujeres, el 74% de los españoles lo desconoce, como recoge la encuesta desarrollada por la SEC con la colaboración de Alpha Research presentada con motivo del próximo 8 de marzo Día Internacional de la Mujer.
Pese a que el 78,1% de los encuestados afirman estar informados en este ámbito, lo cierto es que no. Como se desprende de los resultados presentados este miércoles en la I Reunión SEC Mujer y Corazón, los españoles siguen pensando que las patologías cardiovasculares son cosa de hombres. Así, el 74,1% piensa que el cáncer es la primera causa de muerte en las féminas; el 6%, las enfermedades neurodegenerativas; el 2,3%, la diabetes; y el 1,8%, las enfermedades infecciosas. Un desconocimiento que también comparten las mujeres: el 73,3% señala a otras causas como principal mortalidad.
De esta forma, solo el 25,8% de los encuestados conoce que las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de mortalidad en las mujeres, mientras que el 55,6% piensa de forma errónea que las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en los hombres, cuando en ellos sí son los tumores. Solo los pacientes cardiovasculares y sus familiares presentan mayor grado de conocimiento de las causas de mortalidad y en la encuesta realizada a través de la Plataforma de Pacientes de la Fundación Española del Corazón el 54% señala las enfermedades cardiovasculares como la primera causa de muerte femenina en España.
Las mujeres, además, experimentan cambios hormonales a lo largo de su vida que también pueden afectar al riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares
Tradicionalmente se ha dado mayor visibilidad a los problemas cardíacos en hombres. La presión arterial, alimentación, colesterol, tabaquismo, obesidad y sedentarismo son los factores de riesgo clásico tanto en ellos como en ellas. Las mujeres, además, experimentan cambios hormonales a lo largo de su vida que también pueden afectar al riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, como es la disminución de niveles de estrógenos asociados a la menopausia que produce un cambio en el perfil lipídico, con incremento del colesterol LDL y de triglicéridos. Una realidad que continúa siendo desconocida.
“Estos resultados demuestran que sigue existiendo un amplio margen de mejora en la concienciación y el conocimiento de las enfermedades cardiovasculares en la mujer, y esto tiene un impacto negativo directo en los resultados en salud de las mujeres. Es por ello por lo que, desde la SEC, con el proyecto Mujer y Corazón, pretendemos seguir trabajando en la concienciación global y la promoción de la salud cardiovascular femenina”, ha señalado durante la presentación la Dra. Carolina Ortiz, coordinadora del proyecto Mujer y Corazón de la SEC.
LA MORTALIDAD DEL INFARTO, TAMBIÉN MAYOR EN ELLAS
La mayor mortalidad por enfermedad cardiovascular en las mujeres se da en todas las patologías de naturaleza cardiaca, incluido el infarto agudo de miocardio. “Es cierto que el número de hombres que mueren por infarto agudo de miocardio es superior al de mujeres; en parte debido a que el infarto en los hombres es más frecuente especialmente a edades más jóvenes. Sin embargo, cuando una mujer sufre un infarto tiene más probabilidades de morir”, ha aclarado la Dra. Ortiz.
El 80% de las personas que sufren un ataque cardiaco, independientemente de su sexo, presenta dolor o presión en el pecho
La mortalidad intrahospitalaria por infarto en ellos se sitúa en el 5%, mientras que en la mujer asciende al 9,1%, según datos del Informe Anual del Sistema Nacional de Salud 2022. La razón se debe a que, como señala el Grupo de Trabajo de Mujeres en Cardiología de la SEC, las mujeres suelen consultar más tarde que los hombres cuando presentan un infarto, una circunstancia que puede ser debida a varios factores: la falsa idea de que el infarto es cosa de hombres y el desconocimiento de los síntomas. El 32,6% de los encuestados cree que los síntomas del infarto son diferentes en hombres y en mujeres, pero lo cierto es que el 80% de las personas que sufren un ataque cardiaco, independientemente de su sexo, presenta dolor o presión en el pecho.
“Es importante advertir a la población de que el síntoma más frecuente que debe hacernos sospechar un infarto es el dolor en el pecho, tanto en hombres como en mujeres. Adicionalmente, otros síntomas más inespecíficos aparecen con más frecuencia en las mujeres que presentan un infarto y, en muchas ocasiones, se pueden confundir o ser atribuidos a otras causas”, detalla la coordinadora de Mujer y Corazón. Entre esos síntomas destacan los mareos/síncope, náuseas/vómitos, dolor de mandíbula/cuello, dificultad para respirar, dolor entre los omóplatos, palpitaciones o fatiga.