Investigadores del Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) liderados por Pietro Fazzari, con la colaboración del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y del Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo han identificado alteraciones a nivel molecular y celular de los circuitos corticales que se producen en déficits cognitivos y conductuales relacionados con enfermedades neurológicas como la esquizofrenia.
La esquizofrenia implica una serie de problemas cognitivos, de comportamiento y emociones cuyas causas se desconocen, aunque las últimas investigaciones señalan a una combinación de la genética, la química del cerebro y el ambiente. Según datos de la OMS, la esquizofrenia afecta a más de 21 millones de personas en todo el mundo, pero no es tan común como muchas otras enfermedades mentales. Es más frecuente en hombres (12 millones) que en mujeres (9 millones). Asimismo, los hombres desarrollan esquizofrenia generalmente a una edad más temprana.
El estudio, publicado en la revista Neurobiology of disease, ha analizado los cambios celulares que se producen en la esquizofrenia a través de un modelo de investigación que reduce la expresión de la proteína neuregulina 1 (NRG1), un gen relacionado con múltiples enfermedades humanas entre ellas el cáncer, la esquizofrenia, la epilepsia y neuropatías periféricas.
"Este descubrimiento permitirá desarrollar fármacos más apropiados para pacientes con esquizofrenia y mejorar el conocimiento de este tipo de patologías"
El análisis de los cambios celulares y moleculares producidos por unos niveles bajos o mala regulación de Nrg1 se ha desarrollado a través de distintas técnicas como la espectroscopía por Resonancia Magnética (MRS por sus siglas en inglés) en colaboración con Marina Benito Vicente, del Hospital de Parapléjicos de Toledo; la electrofisiología, en colaboración con Marta Navarrete del CSIC; la imagen por resonancia magnética (MRI), la microscopía confocal y técnicas de biología molecular realizadas en el CIPF.
Ante los resultados de la investigación Fazzani ha destacado que "conocemos todavía muy poco de los mecanismos celulares y moleculares implicados en el desarrollo de esta enfermedad". Y añade que "este descubrimiento permitirá desarrollar fármacos más apropiados para pacientes con esquizofrenia y mejorar el conocimiento de este tipo de patologías. Cuanto más conozcamos de esta enfermedad, mejor podremos afrontarla y facilitaremos que desaparezca el estigma social y la percepción sobre la esquizofrenia que tienen las personas que la padecen".