El TDAH afecta al 7% de los niños en edad escolar

Redacción | Madrid

El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), que afecta hasta un 7% de la población en edad escolar, tiene que ser diagnosticado precozmente porque, de lo contrario,"existe un alto riesgo de fracaso escolar y, lo que es peor aún, la posibilidad de que el niño adquiera una baja autoestima, que una vez establecida será muy difícil de combatir, incluso aunque el niño mejore su rendimiento, y que puede ser además la base de problemas de salud mental más serios, como depresión, ansiedad o trastornos de la personalidad", avisa la doctora Teresa Escobar, especialista de la Unidad de Neurología Infantil de la Clínica La Luz.

El TDAH está causado por un desequilibrio químico en los neurotransmisores cerebrales que se produce, en la mayor parte de los casos, por falta de madurez cerebral. En la práctica los niños con TDAH presentan una mayor dificultad para prestar atención y para controlar sus impulsos, aunque algunos de los síntomas también pueden aparecer en niños sin el trastorno, lo que hace muy importante realizar un diagnóstico adecuado.

Para Escobar, el TDAH puede diagnosticarse a partir de los cinco o seis años de edad, generalmente coincidiendo con la llegada de los niños al colegio, si bien los primeros síntomas, como una inquietud llamativa, pueden estar presentes antes.

SEÑALES

Así, los especialistas de la Unidad de Neurología Infantil de La Luz han identificado como señales de alarma de que el niño padece este trastorno lainquietud anormal y dificultad para permanecer sentado; las interrupciones constantes al interlocutor e incapacidad para esperar su turno, y la conducta irrespetuosa con los demás, con frecuentes molestias a los compañeros.

Además de la dificultad para mantener la atención en juegos y tareas; desorganización y facilidad para perder cosas constantemente; el bajo rendimiento escolar y olvido de las tareas a realizar así como la baja autoestima.

Según explican los neurólogos infantiles de La Luz, el diagnóstico del TDAH no es algo plenamente objetivo como pueda ser el de una neumonía o un tumor, ya que la dolencia “no se ve” como tal en ninguna prueba diagnóstica.

Por último, los especialistas de La Luz recomiendan proceder a una valoración minuciosa del niño por un especialista en la materia si se detectan estas señales de alarma. Si el niño está ya tomando fármacos, su administración debe estar siempre bajo un estricto control y seguimiento por parte de un médico experto.


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