La Confederación Salud Mental España ha presentado recientemente un documento con su nuevo Plan Estratégico 2019-2022 en el que se dan a conocer las que serán sus líneas de trabajo durante sus próximos cuatro años.
La presentación tuvo como objetivo primordial compartir con los asistentes, actuales y futuros aliados, toda la información relativa a las vías de trabajo que la Confederación va a comenzar a desarrollar, “con el fin de que en los próximos años trabajemos de manera conjunta, codo a codo, convirtiéndonos en aliados y estrechando lazos con un objetivo común: colocar la atención y la prevención de la salud mental en el lugar en el que se merece y siempre entendida bajo el paraguas de los derechos humanos”, expresó Nel González Zapico, presidente de Salud Mental España.
“Colocar la atención y la prevención de la salud mental en el lugar en el que se merece”
Las líneas de trabajo de la organización se concentran bajo seis puntos fundamentales. Por un lado está la incidencia política, reivindicación y Defensa de Derechos Humanos, mediante el desarrollo de acciones coordinadas para reclamar un modelo de intervención que permita la adaptación progresiva a las realidades territoriales a través de las políticas públicas, así como realizar seguimiento y aportaciones a la actividad normativa y política.
En segundo punto está centrado en el aumento de la proyección de la marca Salud Mental España, refuerzo del trabajo de sensibilización social y visibilidad de las personas con experiencia propia en salud mental en la Confederación, el movimiento asociativo y la sociedad, y la planificación estratégica de sus alianzas que amplíen la capacidad de incidencia social.
El tercer punto busca el desarrollo de un modelo equilibrado de gobierno para el conjunto del movimiento asociativo, donde personas con experiencia propia, familiares y profesionales puedan aportar su talento y su valor, a través de una estrategia de capacitación con una regulación básica y común de funcionamiento.
La sostenibilidad económica marca el cuarto punto. Esto se va a conseguir a través de una diversificación de las fuentes de financiación, pública y privada, mediante el aumento de personas asociadas, la creación de nuevos modelos de colaboración con empresas, el diseño de nuevas fórmulas de financiación y el acceso a nuevas convocatorias públicas, dada la transversalidad de los problemas de salud mental.
El quinto punto versa sobre la articulación dentro del movimiento asociativo de una red de trabajo liderada desde la Confederación para el intercambio de conocimiento, experiencias y buenas prácticas en el diseño, desarrollo, evaluación y mejora permanente de los productos, servicios, actividades y proyectos de las entidades.
Por último, destaca la generación de ideas que permitan desarrollar nuevos productos, procesos y servicios o mejorar los ya existentes, y transferir ese conocimiento a todo el movimiento asociativo, generando un modelo de gestión propio reconocido y valorado por la sociedad.