Del 20 al 50% de los pacientes tratados de cáncer de próstata recaen en menos de 5 años y, en una mayoría significativa de los casos, la enfermedad se localiza fuera de la región prostática. Frente a esta realidad, se hace evidente la necesidad de disponer de la mejortecnología para la detección precoz de las metástasis.
Los resultados presentados hoy por el grupo biomédico Cetir-Ascires en el VIII Congrés Nacional de Radiòlegs de Catalunya, a partir de su experiencia durante el primer año de funcionamiento del equipo PET/RM en su centro de Viladomat en Barcelona, confirman la capacidad de esta técnica para identificar y localizar lesiones metastásicas en pacientes en los que se estudiaba un cáncer de próstata de alto riesgo y en sujetos que ya habían sido intervenidos quirúrgicamente (prostatectomía) o sometidos a radioterapia y en los que se sospechaba recaída ante niveles sanguíneos aumentados del marcador tumoral PSA (Antígeno Prostático Específico).
La PET-RM detectó y localizó entre 1 y 3 lesiones metastásicas
Cuando a un paciente con altos niveles de PSA se le realiza un estudio PET/RM, en una única sesión, se puede confirmar o descartar si el cáncer se ha extendido, identificar en qué puntos exactos está localizado y planificar un tratamiento personalizado óptimo para cada caso. “Esto posiciona a la PET/RM como la tecnología actual capaz de aportar mayor seguridad diagnóstica y más garantía de éxito en el tratamiento el cáncer”, afirma el Dr. García Garzón, médico nuclear responsable de este estudio.
En más del 70% de los 50 pacientes incluidos en la serie, con alto riesgo de sufrir recurrencia del cáncer prostático, la PET-RM detectó y localizó entre 1 y 3lesiones metastásicas (lo que se conoce comooligometástasis), garantizando una medicina personalizada aplicada a las mismas, con mayor potencial efectivo y menos efectos secundarios. Además, al ser capaz de rastrear hasta los indicios más incipientes de las metástasis, se garantiza su tratamiento precoz.
DE LA TERAPIA ESTÁNDAR AL TRATAMIENTO ‘DIRIGIDO’
El equipo PET/RM, pionero en nuestro país, integra en una sola tecnología híbrida las dos herramientas diagnósticas más potentes en la actualidad para detectar la extensión del tumor de manera precoz: la Tomografía de Emisión de Positrones (PET) y la Resonancia Magnética de alto campo. Esta combinación permite observar, de manera no invasiva, tanto la forma de un órgano como su función, hecho que lo convierte en la opción aventajada para diagnosticar con precisión y tratar con precocidad cánceres como el que centra los resultados del estudio.
El estudio PET/RM 18F-Colina, realizado con este trazador específico del cáncer de próstata que actúa como un marcador de las células tumorales, demuestra que la PET/RM es altamente eficaz para estudiar a pacientes recientemente diagnosticados, por biopsia, de un cáncer de próstata de alto riesgo. En un porcentaje elevado de los casos, detecta las pocas lesiones metastásicas tumorales y las localiza con extrema precisión. Esto ha permitido ofrecer un tratamiento dirigido exclusivamente hacia esas lesiones específicas, en lugar de planificar una terapia ‘a ciegas’ o proceder a una cirugía prostática innecesaria.