Los casos de discapacidad en España provocados por secuelas de patologías asociadas a la obesidad están aumentando de forma "alarmante", según alertan médicos rehabilitadores de la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (SERMEF). Entre las patologías se encuentran los problemas cardiacos, accidentes cerebrovasculares, hipertensión arterial, apnea del sueño o artrosis y problemas de movilidad por lesiones osteoarticulares.
Con motivo del Día Mundial de la Obesidad, conmemorado cada 4 de marzo, la SERMEF recuerda que, en base a datos del Observatorio Mundial de la Obesidad de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 37,75% de las personas mayores de 15 años tiene sobrepeso y el 16 por ciento tiene obesidad.
Desde la SERMEF señalan que las principales causas de discapacidad por obesidad son la cardiopatía, el ictus y el dolor lumbar
Ante la problemática, la SERMEF puso en marcha en 2022 una nueva área específica sobre obesidad denominada Grupo de Trabajo de Obesidad, con el fin de dar respuesta efectiva a las necesidades de atención para las personas que padecen sobrepeso y obesidad en las diferentes áreas de rehabilitación.
En este contexto, desde la SERMEF señalan que las principales causas de discapacidad por obesidad son la cardiopatía, el ictus y el dolor lumbar. Asimismo, otros procesos que habitualmente se tratan en estos servicios son pacientes que han sufrido amputaciones y lesionados medulares, que implican cambios en la composición corporal y el inicio de obesidad.
"Los médicos rehabilitadores trabajamos las secuelas de las enfermedades y situaciones clínicas que producen discapacidad como es la obesidad. Así, centramos nuestra actuación en recuperar o mejorar la función motora en pacientes con discapacidad por problemas neurológicos (con secuelas tras un ictus, por ejemplo) u ortopédicos (lesiones de músculo y hueso)", precisan desde la SERMEF.
SERMEF: "Se trata de un problema esencial el no reconocimiento por parte el Sistema Nacional de Salud de la obesidad como enfermedad y no sólo como un factor de riesgo de padecer otras enfermedades crónicas"
Asimismo, aseguran en que la obesidad están claramente implicados factores sociales como cambios en el estilo de vida con descenso de actividad física, aumento de horas en sedestación y aumento en la ingesta de alimentos ricos en energía, especialmente carbohidratos refinados. "Esto repercute por una parte en una reducción de la esperanza de vida", destacan desde la sociedad científica.
Por último, concluyen que se trata de "un problema esencial el no reconocimiento por parte el Sistema Nacional de Salud de la obesidad como enfermedad y no sólo como un factor de riesgo de padecer otras enfermedades crónicas". "El no reconocimiento como enfermedad implica un infradiagnóstico que condiciona un menor tratamiento".