Hoy, 19 de abril, se celebra el Día Nacional de la Cefalea, más conocida como dolor de cabeza, uno de los motivos más frecuentes de consulta enAtención Primaria, Urgencias y especialistas en Neurología. Concretamente 1 de cada 5 pacientes que acuden al Servicio de Neurología en España es por esta causa. Pese a ser uno de los problemas más habituales del sistema nervioso, provoca dolores que pueden llegar a ser incapacitantes, por lo que supone la pérdida de más de 27 billones de euros al año en nuestro continente causado a la baja productividad.
Si ahondamos más en los datos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que al menos un 50% de la población mundial ha padecido una cefalea primaria, al menos una vez, en el último año. Y en España, según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), más de un 74% de la población ha padecido o padece algún tipo de cefalea primaria, con una distribución por sexos del 69% para los varones y del 79% para las mujeres.
Isabel, presidenta de la Asociación Española de Migraña y Cefalea (AEMICE), tiene migraña, una patología que entra dentro de las cefaleas y que afecta a más del 12% de la población, mayoritariamente, mujeres. Su primera crisis apareció cuando tenía 13 años, pero su vida ha estado marcada por altibajos: “Hasta los 21, que me fui a vivir fuera de España, no me pusieron tratamiento. Luego pasé una época bastante buena, pero entre los 45 y 55 pasé una época muy mala. Pasé de migraña episódica a migraña crónica, que es sufrir dolor más de 15 días al mes”, cuenta.
"En este momento hay fármacos muy potentes, con pocos efectos secundarios y que mejoran mucho la calidad de vida"
Un 4% de la población padece algún tipo de cefalea primaria crónica, lo que significa “no tener vida, no poder comer y no poder hacer nada”. “Se trata de una enfermedad con la que se vive muy mal y sin tratamiento, pero de la que no te mueres. Y ese es uno de los problemas que sufrimos: la banalidad. Además del dolor físico y psicológico, vives de la incomprensión del entorno que creen que estás exagerando o que es un simple dolor de cabeza”, explica la afectada.
Aun así, el cambiar de país fue un respiro para Isabel, ya que reconocieron fácilmente su enfermedad. En la actualidad, se tarda más de seis años en dar con el diagnóstico y, cuando lo identifican, el 70% de los pacientes derivados al neurólogo por dolor de cabeza no realiza ningún tratamiento para prevenirlo. La presidenta de AEMICE conoce muchos de las personas que sufren cefaleas y han acudido a la asociación en busca de ayuda.
Por eso, reconoce que, “en ese periodo tan largo, las personas que tienen migraña creen que solo tienen una cefalea y que es normal vivir con ello, bien porque en muchos casos lo han visto en su casa al tener un componente hereditario, y otras veces piensan que para qué van a ir al médico cuando no tiene cura. Pero hay que tener en cuenta que la migraña no es solo el dolor de cabeza, va acompañado de náuseas, vómitos, fotofobia y fonofobia. Además, vives con la angustia de pensar cuándo te va a dar una crisis”.
"Desde que salieron la última familia de fármacos, los anticuerpos monoclonales, tengo el dolor está bajo control"
Respecto a los tratamientos, se dividen en dos: preventivos para que no se produzcan crisis y aquellos que sirven para el momento en el que se produce una crisis. En el caso de los primeros, hasta hace tres años lo que existía eran grupos de fármacosque no estaban diseñados para la migraña, pero que habían descubierto que su uso combinado con otros fármacos producía una mejora. Es decir, disminuía el dolor de las crisis y su intensidad.
A lo largo de una vida de un paciente con cefaleas, pasar por diferentes tratamientos es lo normal. No es que exista una falta de adherencia, es que “hay veces que no funcionan porque no hay dos migrañas iguales y cada una requiere ser tratada de una manera. Por eso es importante el tratamiento personalizado”.
A sus 60 años, Isabel confiesa que “desde que salieron la última familia de fármacos, los anticuerpos monoclonales, tengo el dolor bajo control. No significa que haya desaparecido, porque la migraña no se cura, pero se maneja y a mí lo que de verdad me cambió la vida fueron los anticuerpos monoclonales”.
FALTA DE COMPRENSIÓN
Antes de terminar esta conversación, Isabel no quiere irse sin antes hacer una denuncia: “Hay una falta de comprensión por falta de conocimiento. Lo más importante es contar que es una enfermedad neurológica discapacitante, no es un dolor producido como consecuencia del estrés. El origen es una disfunción del cerebro y a pesar de llevar un estilo de vida saludable, también puedes tener migraña”.
Es muy importante destacar que “un dolor de cabeza recurrente no es normal y hay que ir al médico y no rendirse por conseguir un diagnóstico. Siempre hay algo que puede mejorar la calidad de vida de una persona con migrañas. En este momento hay fármacos muy potentes, con pocos efectos secundarios y que mejoran mucho la calidad de vida, y, próximamente saldrán otros que mejorarán. Estamos en un buen momento, por eso hay que incitar a las personas con dolor de cabeza a ir al médico y que no se automediquen, porque lo único que produce es la cronificación de la enfermedad”, termina relatando.