Tradicionalmente las personas con discapacidad han sido percibidas como sujetos que reciben apoyo y ayuda. En muy pocas ocasiones cuenta con la posibilidad de involucrarse y participar de forma activa en los problemas de la sociedad.
Con el objetivo de defender el derecho a la vida y a la dignidad de las personas con síndrome de Down u otra discapacidad intelectual, la fundación Down Madrid trabaja desde hace 30 años promoviendo y realizando actividades encaminadas a lograr la plena integración familiar, social, educativa y laboral, que mejoren la calidad de vida de estas personas. “Nosotros queremos cambiar la situación actual. Estas personas llevan tiempo demostrando que cuando se les da la oportunidad, también ejercen sus derechos y obligaciones”, señala Paula Martinelli, Directora Técnica de Down Madrid.
La esperanza de vida de las personas con síndrome de Down ha aumentado en 2.7 años por año
El síndrome de Down no es una enfermedad. Es una condición de origen genético que se produce por la presencia de un cromosoma extra en el par 21, también conocido como ‘Trisomía 21’. Con una incidencia de 1 por cada 800 nacidos, es consolidado como la cromosomopatía más frecuente y conocida.
Aunque no existen datos oficiales, según las estimaciones la esperanza de vida de estas personas se sitúa entre los 62 y 63 años, “lo más relevante es que en los últimos 30 años su esperanza de vida ha aumentado 2.7 años por año”, destaca Martinelli. Un hecho donde mucho tienen que ver los avances médicos, pero también la labor de las familias y asociaciones que han promovido hábitos de vida saludable y han trabajado para que las personas con síndrome de Down u otras discapacidades intelectuales sigan teniendo un proyecto de vida útil y activo en todas las etapas vitales
OPORTUNIDADES AL TALENTO
Disponer de un empleo es un principio fundamental, tanto para integración social como para el desarrollo de la personalidad. Sin embargo, las personas con síndrome de Down encuentran en su día a día barreras significativas a la hora de acceder a un puesto de trabajo. De manera reivindicativa, desde Down Madrid defiende el derecho a “seguir adquiriendo aprendizajes más allá de la etapa educativa formal”. Además, ven necesaria la creación de programas educativos “apoyados por servicios públicos que posibiliten a las personas con discapacidad una formación dirigida al empleo que tenga en cuenta sus vocaciones y que esté adaptada a sus necesidades”.
Down Madrid promueve la inserción laboral a través de la metodología del Empleo con Apoyo
Con la mirada puesta en facilitar y promover la inserción social y laboral de las personas con síndrome de Down y discapacidad intelectual en entornos ordinarios de trabajo, esta fundación dispone de un servicio pionero en la comunidad: el Servicio de Empleode Down Madrid.
“En Down Madrid pretendemos, a través de la metodología del Empleo con Apoyo, capacitar al trabajador para el desarrollo de un perfil profesional específico, recibiendo para ello un entrenamiento en las tareas propias de su puesto de trabajo”, señala Begoña Escobar, Coordinadora de Empleo y Centro Ocupacional de la asociación. “En la actualidad contamos con más de 250 personas empleadas en diferentes empresas de la Comunidad de Madrid”.
SU VOTO CUENTA
Hace escasos meses el Congreso de los Diputados aprobó por unanimidad la reforma de la Ley Orgánica de Régimen Electoral General (Loreg), que permite votar a 100.000 personas con discapacidad intelectual, enfermedad mental o deterioro cognitivo.
Así bien, tras una lucha ardua, España se ha unido a Austria, Croacia, Holanda, Italia, Letonia, Suecia y Reino Unido, convirtiéndose en el octavo país de la Unión Europea que no aplica restricciones por razón de discapacidad a la hora de votar, “Este avance demuestra a la sociedad que las personas con síndrome de Down u otra persona con discapacidad intelectual, con los apoyos necesarios, pueden hacer lo mismo que los demás”, argumenta Martinelli.
No conformes, para Down Madrid este tema no acaba aquí, “hay que seguir trabajando para que todos los partidos políticos hagan sus programas electorales en lectura fácil o que exista una figura de apoyo para que puedan explicar de forma más accesible estos programas, facilitando el camino a su ejercicio democrático”, concluye la directora técnica de Down Madrid.