Las últimas cifras disponibles revelan que una de cada ocho mujeres padecen un cáncer de mama a lo largo de su vida. Con motivo del Día Mundial contra el Cáncer de Mama que se celebra este sábado, 19 de octubre, ConSalud.es ha charlado con el doctor Alberto Ocaña, director de la Unidad CRIS Contra el Cáncer de Nuevas Terapias en el Hospital Clínico San Carlos (Madrid), quien ha hecho un repaso a la situación actual de la enfermedad en España.
El especialista en Oncología explica que el Sistema Nacional de Salud (SNS) se encuentra en un "primer nivel" de acceso a fármacos nuevos, "tanto para pacientes que tienen opción de curarse como para aquellas personas que están con enfermedad avanzada". "Nos servimos de fármacos que se aprueban pocos meses antes en Estados Unidos", asevera.
"Nos encontramos en un primer nivel de acceso a fármacos nuevos, tanto para pacientes que tienen opción de curarse como para aquellas personas que están con enfermedad avanzada"
En este punto, el doctor Ocaña insiste en la importancia de impulsar tratamientos en el subgrupo de tumores de mama triple negativo, es decir, una forma de cáncer agresiva que, a día de hoy, no cuenta con una terapia específica y que afecta al 15% de las mujeres que sufren esta patología.
"Dentro de poco tiempo vamos a poder prescribir dos nuevos tratamientos: uno basado en inmunoterapia y otro específico para pacientes que tengan mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2. Vamos a poder recetar estas terapias dentro de un año a nuestras pacientes", anuncia el también investigador de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM).
UN FUTURO PROMETEDOR
A juicio de Alberto Ocaña, las expectativas de futuro en la enfermedad son "muy buenas". Así, a los nuevos fármacos que llegarán para el subgrupo triple negativo, se suman otros tratamientos para el cáncer de mama hormonal o el conjunto de los HER2 positivo, unas terapias que estarán a disposición de las pacientes "en los próximos dos o tres años".
"Hace apenas unos años, esta enfermedad no tenía las tasas de curación que tiene ahora"
Toda vez que recuerda la importancia de la detección precoz, el doctor Ocaña insiste en el hecho de que, hace apenas unos años, "esta enfermedad no tenía las tasas de curación que tiene ahora". "Hay que ser cuidadosos con los mensajes que transmitimos, pero también es necesario ser optimistas", finaliza.