El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) y la Oficina Regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) han publicado un nuevo informe con motivo del Día Mundial de la Lucha contra el Sida. De acuerdo con los datos recogidos en este, se aprecia una caída del 24% en las tasas de casos de VIH diagnosticados entre los años 2019 y 2020. Un descenso que los expertos atribuyen a las restricciones y confinamientos derivados de la pandemia provocada por el SARS-CoV-2, que han afectado durante meses a los servicios diagnósticos.
El informe califica como “preocupante” este dato ya que a lo largo de la última década se ha experimentado un incremento de las nuevas infecciones por VIH en el continente europeo, lo que sugiere que existe un elevado porcentaje de población infectada que no es consciente de su situación.
A pesar del potencial infradiagnóstico y el subregistro de casos de 2020, se diagnosticaron 104.765 nuevas infecciones por VIH en 46 de los 53 países de la Región Europea, incluyendo 14.971 procedentes de los países de la Unión Europea (UE) y el Espacio Económico Europeo (EEE). Unas cifras que se traducen en 11,8 infecciones recién diagnosticadas por cada 100.000 habitantes en la Región Europea.
EL GOLPE DE LA PANDEMIA
“El 2020 ha sido un año clave para el VIH cuando necesitábamos alcanzar los objetivos 90-90-90 de pruebas, tratamiento y supresión viral para estar en camino de cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de 2030”, expresa la directora del ECDC, Andrea Ammon. “Si bien hemos visto una disminución en los casos en 2020, es probable que una proporción sustancial se deba a una menor tasa de diagnósticos tempranos, dado que los servicios de pruebas del VIH se redujeron o no estuvieron disponibles durante una parte de 2020 debido a las medidas impuestas por la Covid-19. En este contexto, creo que es justo decir que la mayor parte de Europa no alcanzará los objetivos de 2030, a menos que abordemos algunas deficiencias importantes en la continuidad de la prevención, las pruebas y el tratamiento”, asevera Ammon.
Desglosando los datos del informe vemos que los países con mayor tasa de nuevos diagnósticos son Malta (15,9 / 82 casos), Letonia (13,5 / 257 casos), Chipre (11,8 / 105 casos) y Estonia (10,8 / 143 casos). En el lado opuesto se sitúan Eslovenia (1,3 / 27 casos) y Austria (1,7 / 155 casos). La tasa de nuevos diagnósticos de VIH en 2020 fue mayor en hombres (5,2 por cada 100.000 habitantes) que en mujeres (1,5 por cada 100.000 habitantes). En estos términos las mayores tasas se han reportado en Hungría (11,1) y Eslovaquia (8,1).
"Si bien hemos visto una disminución en los casos en 2020, es probable que una proporción sustancial se deba a una menor tasa de diagnósticos tempranos, dado que los servicios de pruebas del VIH se redujeron o no estuvieron disponibles durante una parte de 2020 debido a las medidas impuestas por la Covid-19"
“Es importante reconocer el impacto de la crisis de la Covid-19 en los pacientes y en los sistemas de salud. Está claro que debemos hacer más por las personas que viven con el VIH en lo que respecta a la calidad de vida relacionada con la salid”, afirma la Comisaria de Salud de la Unión Europea, Stella Kyriakides. “Gracias a los avances en el tratamiento, la esperanza de vida ha aumentado significativamente para las personas que viven con el VIH y esta población es más grande que nunca”, expone señalando que es fundamental “acercar los servicios de VIH a nuestras comunidades y adaptar las prestaciones de atención médica a las necesidades de los pacientes”.
“Debemos invertir en nuevos enfoques de prevención, tratamiento y atención. Juntos daremos prioridad a las necesidades de los pacientes y acabaremos con el estigma y la discriminación de tantas personas que viven con el VIH”, asegura la comisaria europea.
PRINCIPALES VÍAS DE TRANSMISIÓN
El informe señala que las principales vías de transmisión en los países con las proporciones más altas entre hombres y mujeres son las relaciones sexuales entre hombres que representan el 39% (5.815 personas) de todos los nuevos diagnósticos en 2020, y representan además el 53% de las vías de transmisión identificadas en el documento. El sexo entre hombres se erige como la vía de transmisión del VIH en más del 60% de los nuevos casos detectados en 2020 en Croacia, Chipre, Hungría, Islandia, Países Bajos, Polonia, Eslovaquia y España.
Las relaciones sexuales heterosexuales son la segunda vía de infección más habitual. Estas representaron el 29,6% (4.445 personas) de las nuevas infecciones diagnosticadas en 2020, así como el 41% de las vías de contagio identificadas. Las relaciones sexuales heterosexuales han sido la vía de transmisión de la enfermedad predominante en 2020 en Estonia, Finlandia, Letonia, Luxemburgo, Rumania y Suecia.
“Con la atención del mundo centrada en la pandemia de Covid-19, no podemos olvidar otro virus mortal que ha devastado vidas y comunidades durante casi 40 años. Desde que se identificó por primera vez el virus del VIH en 1984, se ha cobrado más de 35 millones de vidas, lo que la convierte en una de las pandemias más destructivas de la historia”
La transmisión a través del consumo de drogas representa el 3,8% de los nuevos casos, siendo la vía de transmisión más probable en cuarto de los casos detectados en Letonia y del 18% de las nuevas infecciones registradas el pasado año en Grecia.
La transmisión vertical representó menos del 1%, mientras que un 26,9% no reporta una vía de infección clara. El documento expone que el 44% de todos los diagnósticos registrados en la UE/EEE correspondieron a inmigrantes. El 15% procedente de países del África subsahariana, 10% procedentes de América Latina y Caribe, 9% de países de Europa del este y un 3% de países de Europa oeste.
Los hombres reportan mayores tasas de infección por VIH en todos los grupos de edad salvo en los menores de 15 años. Los jóvenes con edades comprendidas entre los 15 y los 24 años representan el 11% de la población de la UE/EEE y el 9,9% de las nuevas infecciones diagnosticadas durante el pasado año. El 41% de la población de la UE/EEE considerada como “adultos mayores” (de 50 años en adelante) constituyen el 21% de las nuevas infecciones por VIH registradas en 2020.
“Con la atención del mundo centrada en la pandemia de Covid-19, no podemos olvidar otro virus mortal que ha devastado vidas y comunidades durante casi 40 años. Desde que se identificó por primera vez el virus del VIH en 1984, se ha cobrado más de 35 millones de vidas, lo que la convierte en una de las pandemias más destructivas de la historia”, ha comentado Hans Henri P. Kluge, director regional de la OMS para Europa.
“En los últimos años, muchos países de la Región de Europa han trabajado para aumentar las pruebas y el tratamiento al tiempo que abordan el estigma social. Pero los nuevos datos recopilados desde la aparición de la Covid-19 dibujan un panorama preocupante, lo que sugiere que muchas personas que viven con el VIH no están siendo diagnosticadas a tiempo, lo que podría tener consecuencias a largo plazo en su calidad de vida”, añade.
“A medida que continuamos abordando la pandemia de Covid-19, debemos volver al camino en nuestra lucha contra el VIH y el sida. Todavía hay demasiada estigmatización, discriminación y desinformación en torno a este virus, con enormes disparidades en los diagnósticos y tratamientos dentro de la Región de Europa. Juntos, podemos acabar con el sida para 2030”, concluye.