El primer domingo de octubre se celebra el Día Europeo de la Depresión, una enfermedad que afecta cada vez a más personas. A nivel global, se estima que más de 300 millones de personas padecen depresión. En España, según un informe de Fundamed publicado en 2021, cerca de 4.500 personas por cada 100.000 habitantes sufrían de algún tipo de trastorno depresivo, lo que equivale a casi 3 millones de personas diagnosticadas.
En cuanto a la opinión de la población española, y según los datos del informe ‘Estado de la Salud’, elaborado por la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), aproximadamente el 6% informó haber experimentado episodios de depresión durante el último año, superando ligeramente el promedio del 5% registrado en la Unión Europea. Este problema es particularmente grave entre las mujeres y las personas con menores ingresos, como lo revela este documento. Estos grupos enfrentan mayores barreras para acceder a una atención adecuada y oportuna.
El informe también subraya la influencia de la situación económica en la prevalencia de la depresión. En España, el 9.5% de las mujeres con los ingresos más bajos presentan síntomas de depresión, mientras que entre las mujeres con ingresos más altos esta cifra desciende al 4.8%. Esto demuestra cómo la falta de recursos económicos puede agravar la vulnerabilidad frente a la enfermedad, afectando la calidad de vida y las posibilidades de recuperación.
Un 18% de los pacientes en España informaron que no recibieron la atención médica que necesitaban
Asimismo, a pesar de la importancia del tratamiento para la salud mental, un 18% de los pacientes en España informaron que no recibieron la atención médica que necesitaban, de acuerdo con el mismo informe. De este porcentaje, una quinta parte señaló que se trataba de atención relacionada con la salud mental, cifras que reflejan una situación similar a la del resto de Europa. Esta falta de acceso al cuidado adecuado pone en evidencia la necesidad de mejorar los sistemas de salud mental en España.
Precisamente en línea con esto último, el psicólogo Buenaventura del Charco asegura en una entrevista para ConSalud.es que “en España la situación en salud mental es desalentadora”. “Somos un país con unas tasas de salud mental muy malas”, sostiene. Es más, si vemos los datos generales de enfermedades mentales en España, podemos apreciar como hemos pasado de un 25% a un 35% de prevalencia de estos problemas.
“En España tenemos un ratio de seis psicólogos por cada 100.000 habitantes”
Y ante esta situación, la escasez de psicólogos no ayuda. “En España tenemos un ratio de seis psicólogos por cada 100.000 habitantes”, explica el psicólogo, atendiendo a los datos del último informe del Colegio Oficial de Psicólogos. Es una diferencia muy grande con el resto de Europa, “teniendo en cuenta que la media europea es de 18 psicólogos por cada cien mil habitantes”.
Y es que, no hay suficiente atención especializada para personas que sufren enfermedades como la depresión y, por tanto, pueden pasar meses hasta que se inicia el tratamiento. “Pasa mucho tiempo desde que pides cita y hasta que te atiende el psiquiatra, que también están bastante desbordados, e incluso pueden pasar dos o tres semanas más hasta que inicias el tratamiento”, sostiene. “Incluso teniendo un seguro privado los tratamientos son ineficaces en el tiempo”.
En el caso de la atención a la salud mental en el Sistema Nacional de Salud, España sufre largas listas de espera. En muchas ocasiones, en palabras del experto, los casos más graves entran a consultas públicas de atención a la salud mental, “aunque tiene que haber una intencionalidad suicida”. “Pero cuando se trata de una depresión o un trastorno de ansiedad, muchas veces se atiende en Medicina de Familia”, indica.
“Los psicofármacos combinados con la psicoterapia es realmente el tratamiento más eficaz para trastornos como la depresión"
“No es culpa del médico que cada vez se receten más ansiolíticos, porque hace lo que está en su mano”, explica el psicólogo. Es más, “los psicofármacos combinados con la psicoterapia es realmente el tratamiento más eficaz para trastornos como la depresión”, pero en España el acceso a la psicoterapia no es nada sencillo. Y precisamente, "la obligación de tener que pagar una terapia influye en la propia salud mental”, añade.
Por esta razón, el psicólogo insiste en que, “si estamos hablando de la importancia de la salud mental y estamos quitando el estigma”, también se necesita un acceso real de los ciudadanos a las consultas de psicoterapia. “Si no va acompañado de la atención de un psicoterapeuta, dar visibilidad a la salud mental se convierte en un brindis al sol”, concluye.