Son muchos los factores que pueden afectar a la salud de las personas y las comunidades. El que una persona esté sana o no puede estar motivado en gran medida por sus circunstancias y entorno. Por ejemplo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que los determinantes sociales de la salud pueden ser más importantes que la atención médica o las opciones de estilo de vida a la hora de influir en la salud ya que algunos estudios sugieren que estos representan entre el 30 y el 55% de los resultados de salud.
Partiendo de esta fotografía centramos la atención el informe “Comparación del sistema sanitario español con los países de la Unión Europea”, elaborado por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública en base a los datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Entre los diversos aspectos que se abordan en este documento encontramos varias comparativas entre España y los países europeos atendiendo a una serie de determinantes de la salud.
Iniciamos el recorrido a través de estos por las muertes prematuras atribuidas a la polución exterior. De forma general estas son más elevadas en Centroeuropa y Europa del este, mientras que son más bajas en el norte del continente. La tasa de muertes prematuras atribuidas a la polución exterior en la Unión Europea en 2018 fue de 79 por cada 100.000 habitantes, mientras que en España se redujeron a 52 por cada 100.000 habitantes.
La epidemia de tabaquismo es una de las mayores amenazas para la salud pública a nivel global. Los datos de la OMS señalan que acaba con la vida de más de ocho millones de personas cada año. En 2019 el porcentaje de población mayor de 15 años que consumía tabaco de forma habitual en la Unión Europea era del 10,42 (datos de 22 Estados miembros). España se sitúa por encima con un 19,8%. En el caso de los vapeadores el promedio europeo fue en 2019 del 2,4% (datos de 22 Estados miembros), mientras que en España se situaba en el 1,8%.
La OMS advierte de que el uso nocivo del alcohol es un factor causal en más de 200 enfermedades y trastornos. Cada año se registran más de tres millones de muertes en todo el mundo debido al consumo nocivo del alcohol, lo que representa hasta el 5,3% de todas las defunciones. En 2020 el consumo de alcohol en población mayor de 15 años (litros por adulto y por año) en la Unión Europea fue de 9,6. En este caso España se sitúa por debajo con 7,8, lo que sitúa a nuestro país en los mínimos de consumo de la Unión Europea.
"Tenemos unas tasas de contaminación ambiental similares a las de la Unión Europea, en todo caso elevadas y con riesgos importantes para la salud"
En relación al consumo de sustancias el informe recoge datos de dos. La primera de ellas es el consumo de cannabis en los 12 últimos meses en europeos con edades comprendidas entre los 15 y los 34 años. El promedio de la Unión Europea (datos de 26 Estados miembros es del 12,5%. España se encuentra muy por encima con un 18,3%. La segunda de las sustancias es la cocaína: 1,6% en la Unión Europea (datos de 26 Estados miembros) y 2,8% en el caso de España.
Avanzamos en el informe y llegamos al consumo de grasas en 2019 (gramos por persona y día). El promedio europeo en 2020 (datos de 25 Estados miembros) fue de 138,2. España se posicionó por encima de la media con 154,7, y el informe matiza que la evolución es creciente.
En el caso del consumo de azúcar en 2019 (kilogramos por persona y año) la media de los países de la Unión Europea (datos de 25 Estados miembros) fue de 55 kilogramos por persona al año. El promedio de España desciende en este determinante de la salud hasta los 35,1 kilogramos por persona al año.
El informe evalúa además el aporte calórico total en 2019 (medido en kilocalorías por persona y día). En este indicador la media europea (datos de 25 Estados miembros) fue de 3.377 mientras que en España se redujo hasta las 3.348 kilocalorías por persona diarias. El consumo diario de fruta o verdura en 2019 en España fue confirmado en el 71,2% de las mujeres y en el 63,9% de los hombres. La media del país fue del 67,7%, muy por encima del 53,2% reportado por los países europeos (datos de 22 Estados miembros) en 2019.
El 19,4% de los españoles se autodeclaran como obesos (14,3% de las mujeres y 15,5% de los hombres). Tasas que se encuentran por debajo del 17,6% de las mujeres y del 18,6% de los hombres que en 2020 se autodeclaraban obesos en la Unión Europea (datos de 23 Estados miembros).
“En resumen, tenemos unas tasas de contaminación ambiental similares a las de la Unión Europea, en todo caso elevadas y con riesgos importantes para la salud”, recogen las conclusiones del informe.
“El consumo de fruta y verdura entre los jóvenes es bajo y las tasas de obesidad, aunque por debajo del promedio de la Unión Europea son preocupantes. El tabaquismo y el consumo de alcohol se revelan como problemas significativos por resolver. El consumo de frutas y verduras y la obesidad a los 15 años están en una situación manifiestamente mejorable”, concluye el informe.