El año 2018 fue especialmente activo para el Defensor del Pueblo en materia sanitaria. Así lo revela el Informe anual presentado este martes por esta entidad, encarnada en la persona de Francisco Fernández Marugán, en el Congreso de los Diputados. Y es que en el pasado año se registraron un total de 824 quejas en sanidad, un 59% más que las que hubo en 2017 (517 quejas).
De las 824 quejas recibidas, 629 fueron individuales y 195 fueron agrupadas. Por su parte, el Defensor del Pueblo inició 25 actuaciones de oficio en 2018, 12 menos que las que implementó el año anterior, cuando se contabilizaron 37 actuaciones. Mientras, el pasado año no se produjo ninguna solicitud de interposición de recurso ante el Tribunal Constitucional por alguna queja sanitaria.
Sumando las quejas y las actuaciones de oficio, el área de Sanidad protagonizó 849 expedientes tramitados en 2018 por el Defensor del Pueblo
En total, sumando las quejas y las actuaciones de oficio, el área de Sanidad protagonizó 849 expedientes tramitados por la institución que dirige Fernández Marugán. De ellos, destacan 51 expedientes de quejas individuales, admitidos y tramitados ante el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social: 30 están en trámite, 20 están concluidos y uno permanece en suspenso.
Presentación del Informe Anual de 2018 del Defensor del Pueblo en el Congreso de los Diputados
En cuanto a la conclusión, 11 expedientes han obtenido una actuación correcta; tres se han subsanado; cinco no se han subsanado; y uno cuenta con una conclusión diferente. Con respecto a las actuaciones de oficio, un expediente ante el Ministerio de Sanidad está en trámite y uno está concluido, obteniendo una actuación correcta.
PRINCIPALES QUEJAS: PRIMARIA, COPAGO Y DISPERSIÓN
En relación a la universalidad de la asistencia sanitaria, a raíz del RD-Ley 7/2018, el Defensor especifica que en la segunda mitad de 2018 no recibió “un número significativo de quejas relacionadas con la aplicación del nuevo marco legal, aunque en algunas se han planteado dudas sobre el cauce para obtener el reconocimiento del derecho a la asistencia sanitaria en este período transitorio”.
Esta institución subraya que se están dando dificultades asociadas a la dispersión o a la ubicación geográfica y que repercute sobre la calidad en la atención especializada
Por su parte, las principales actuaciones han versado sobre el proceso de seguimiento para la incorporación de nuevas prestaciones en la cartera común de servicios del Sistema Nacional de Salud; las relacionadas con las listas de espera, especialmente con los procedimientos para el implante de prótesis de mama postmastectomía; o las llevadas a cabo en el ámbito de la Atención Primaria sobre la falta de facultativos.
Asimismo, algunas de las quejas más habituales son las relacionadas con la asistencia en la atención especializada. En este punto, el Defensor del Pueblo subraya que se dan “dificultades asociadas a la dispersión o a la ubicación geográfica” lo que repercutiría “en la calidad de atención que reciben los ciudadanos”. Por ello, han instado a emprender “una más intensa coordinación interadministrativa”.
Finalmente, se han abordado actuaciones en materia de atención a la salud mental, el transporte sanitario o el copago farmacéutico. Sobre este asunto, la institución de Fernández Marugán señala que algunos pacientes “no alcanzan a entender cómo pueden tener asignado un tipo de aportación farmacéutica igual a la de un trabajador en activo, a pesar de encontrarse en una situación de gran vulnerabilidad, social y económica”.