Crece la pérdida auditiva entre los jóvenes, hasta 34 millones en el mundo

Unos 34 millones de niños y jóvenes padecen una pérdida auditiva incapacitante en el mundo, según datos de la OMS, y la principal causa es el uso insaludable de la tecnología

Joven usando auriculares de forma insaludable (Foto: Pixaby)
24 noviembre 2024 | 11:00 h
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Hasta ahora, la pérdida auditiva solía manifestarse entre los 60 y 70 años, con dificultades para entender el habla y una serie de síntomas que se intensificaban con el paso de los años. Sin embargo, en la actualidad, se observa un descenso en la edad de aparición de estos problemas auditivos.. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que alrededor del 5% de la población mundial, unos 466 millones de personas, tienen una pérdida auditiva incapacitante, y, de este grupo, alrededor de unos 34 millones son niños y jóvenes.

Esta caída en la edad de inicio responde al gran cambio en los hábitos sociales que han llevado a un aumento importante del uso de la tecnología, con una exposición excesiva a ruidos intensos como escuchar música a un elevado volumen a través de auriculares. Actualmente, la mitad de las personas de entre 12 y 35 años utiliza dispositivos electrónicos a niveles inseguros en países de ingresos medios y altos. Y la realidad es que bastan ocho horas de exposición a un ruido de más de 90 decibelios para afectar a un grupo de células del oído interno y lesionarlas definitivamente, según recoge la OMS. Además, los auriculares que se insertan en el canal auditivo pueden causar más daño que los auriculares externos debido a su proximidad al tímpano.

 “No es sentir que uno oye menos, suele ser me cuesta entender y, sobre todo, conversaciones donde hay mucha gente a mi alrededor o ruido de fondo"

Uno de los mayores desafíos que enfrentamos es la falta de conciencia sobre la importancia de cuidar nuestra audición desde temprana edad. Los adolescentes a menudo no reconocen los síntomas iniciales de la pérdida auditiva, lo que retrasa el diagnóstico y el tratamiento. Como indica la Dra. Rocío González vocal de la comisión de audiología de la SEORL-CCC a ConSalud.es, los primeros síntomas para reconocer un problema auditivo “no es sentir que uno oye menos, suele ser me cuesta entender y, sobre todo, conversaciones donde hay mucha gente a mi alrededor o ruido de fondo, es decir, tener cierta dificultad para escuchar en un ambiente ruidoso suele ser uno de los primeros síntomas, es lo que nosotros llamamos inteligibilidad”.

El riesgo de quedarse sordo de uno de los oídos es moderado, pero el riesgo de pérdida de audición es muy elevado. Esta disminución de la capacidad auditiva se denomina hipoacusia y puede tener distintos grados que van desde una pérdida auditiva leve, pasando por moderada hasta grave, afectando de forma bilateral o unilateral dependiendo de si se surge en uno o ambos oídos.

Entre los síntomas  de la hipoacusia están la dificultad para escuchar sonidos cotidianos provenientes de la televisión, la radio, el ordenador u otros dispositivos, percibir sonidos de más altos de lo que en realidad son, problemas para seguir una conversación que se produce entre dos o más personas, complicación en diferenciar sonidos agudos, etc.

Otro riesgo asociado al mal uso de la tecnología y al desarrollo de la pérdida de audición es el tinnitus, llamado también acúfeno, una sensación de escuchar pitidos o zumbidos de forma permanente en los oídos, provocados por una interpretación incorrecta de los impulsos nerviosos por parte del cerebro.

Se aconseja seguir la regla del 60-60, no más de 60 minutos a más del 60% del volumen

Ante estas complicaciones, cuidar la salud auditiva resulta esencial. Desde la OMS recomiendan no exponerse a ruidos de intensidad superior a 65 decibelios, ya que escuchar un ruido de más de 70 decibelios durante un tiempo prolongado puede provocar un daño en el oído con consecuencias que pueden llegar a ser irreparables. Actualmente, la contaminación acústica, presente principalmente en las ciudades, complica la protección de la salud auditiva. Para prevenir los problemas asociados a su deterioro, se aconseja seguir la regla del 60-60, no más de 60 minutos a más del 60% del volumen que permiten los reproductores musicales.

Para evitar una falta auditiva perpetua, la SEORL-CCC está realizando diferentes campañas de concienciación, la gran mayoría a través de redes sociales. “La gente joven consume muchísimo estos contenidos en social media, que vengan de un organismo competente y profesional, es de gran ayuda para que puedan concienciarse sobre este problema. Desde la sociedad difundimos, concienciamos y explicamos el porqué y, sobre todo, alertamos de lo que está pasando en estos últimos años”, indica la doctora Rocío González.

La prevención es esencial porque para la pérdida de audición no hay cura. La doctora señala que los pacientes han de usar audioprótesis, es decir, de audífonos. Además, ”se están ensayando diferentes terapias génicas para la sordera de causa genética, pero en el caso de los jóvenes o personas adultas, este tipo de pérdida solo se puede tratar con audífonos y en algunos casos un implante coclear”.

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