Un cepillado de dientes correcto permite eliminar los alimentos y la película blanca y pegajosa que se incrusta en los dientes, formada por bacterias y conocida como placa.
Según el Estudio Sanitas de Salud Bucodental 2022, solo la mitad de los españoles adultos se cepillan tres o más veces al día, cuando la recomendación de los expertos es que se haga después de cada comida. En cuanto al colutorio, siete de cada diez españoles lo utilizan a diario, y cuatro de cada diez, hilo dental.
“Resulta fundamental interiorizar una rutina periódica de higiene bucodental y que ésta sea eficaz"
Manuela Escorial, odontóloga del departamento de Innovación y Calidad Clínica de Sanitas Dental, explica la importancia de interiorizar una rutina periódica de higiene bucodental y que ésta sea eficaz. "El cepillado por sí sólo no es eficaz. La incorporación del uso de seda o cepillos interproximales diaria evita la aparición de caries y problemas de encías, facilitando la autodetección precoz de problemas. Esta rutina favorecerá que las visitas al odontólogo sean de mantenimiento y de carácter preventivo, es decir, acudir al odontólogo para estar siempre bien”.
Esta experta aporta una serie de pautas para eliminar la placa y garantizar la correcta salud bucodental:
- Cambiar el cepillo de dientes: en el momento en el que las cuerdas estén desgastadas cada dos o tres meses o tras haber pasado una gripe o un resfriado.
- Técnica de Bass Modificada: se trata de la técnica más utilizada para eliminar la placa bacteriana que se genera en el espacio de la encía y el diente. Consiste en poner el cepillo en un ángulo de 45º con relación al surco gingival y realizar movimientos que sean vibratorios y cortos en horizontal.
- La cantidad de pasta: con una cantidad similar a un guisante es suficiente para poder limpiar adecuadamente la boca.
- Tiempo de cepillado: es necesario un mínimo de dos minutos aproximadamente, comenzando por la parte anterior y posterior de la pared superior y posteriormente, finalizar con la inferior. Además, es necesario no olvidarse la lengua, ya que es una de las zonas donde es más sencillo que proliferen bacterias y se produzca el mal aliento.
- Hilo dental (o seda): su uso es esencial para la limpieza total, puesto que hay zonas a las que el cepillo no puede acceder. En algunos casos, la seda debe ser sustituida por cepillos interproximales.
- El colutorio: su utilización ayuda a evitar problemas bucales como la gingivitis o la enfermedad periodontal. Es preferible priorizar los que no contengan alcohol en su composición.
- Elegir el momento óptimo para el cepillado: tras ingerir algún alimento o bebida ácida, se recomienda cepillarse los dientes de inmediato para que el esmalte dental no se debilite. Los expertos apuntan a media hora después de comer para asegurarse que el pH ha vuelto a la normalidad debido a la acción de la saliva.