El ministro de Consumo, Alberto Garzón, protagonizó parte de la actualidad hace unas semanas cuando anunció que el departamento que dirige regularía los horarios para emitir publicidad de alimentos y bebidas no saludables que va dirigida a la población infantil y adolescente. Al igual que se ha hecho con las apuestas online para frenar la ludopatía, el Gobierno quiere actuar para combatir el sobrepeso y la obesidad.
Según los últimos datos del Estudio Aladino sobre alimentación, actividad física, desarrollo infantil y obesidad en España, con cifras del 2019, la prevalencia de estas enfermedades “ha crecido de forma sostenida en las cuatro últimas décadas”. Ahora, “cuatro de cada diez escolares de 6 a 9 años presenta exceso de peso”. De forma exacta, la prevalencia de sobrepeso es del 23,3% y de obesidad del 17,3%.
Según el estudio Aladino, con datos de 2019, un 9,7% de los escolares “tiene una dieta de muy baja calidad”, un 76,2% de los escolares “necesita mejorar la calidad de su dieta”
Por su parte, este estudio ofrece cifras reveladoras sobre la alimentación en el ámbito escolar. Por ejemplo, un 9,7% de los escolares “tiene una dieta de muy baja calidad”, un 76,2% de los escolares “necesita mejorar la calidad de su dieta” y tan solo un 14,1% “sigue una dieta mediterránea óptima”. En este contexto, ConSalud.es ha analizado la actual legislación, en la cual ya se regulan actuaciones más ambiciosas.
LEY DE SEGURIDAD ALIMENTARIA, DE 2011
En una respuesta parlamentaria a preguntas de Vox sobre si tiene intención de aprobar un plan específico para luchar contra la obesidad en las escuelas, el Gobierno cita por un lado a la Ley 17/2011, de 5 de julio, de seguridad alimentaria y nutrición, que en su artículo 40 se refiere a medidas especiales dirigidas al ámbito escolar.
Por ejemplo, se indica que las autoridades educativas “promoverán la enseñanza de la nutrición y alimentación en las escuelas infantiles y centros escolares para dotar al alumnado de los conocimientos para hacer elecciones correctas de alimentos que permitan llevar una alimentación sana y equilibrada y ejercer el autocontrol en su alimentación”.
La Ley de Seguridad Alimentaria subraya que los planes formativos del profesorado deben tener "contenidos orientados a la prevención y concienciación de los beneficios de una nutrición equilibrada"
Para lograr este objetivo, la norma apunta que los planesformativos del profesorado “tendrán contenidos orientados a la prevención y a la concienciación sobre los beneficios de una nutrición equilibrada”. Además, la Ley subraya que las autoridades educativas “promoverán el conocimiento entre el alumnado de los beneficios de la actividad física para la salud, con el fomento de su práctica habitual entre los escolares”.
LEY EDUCATIVA, DE 2020
En otra respuesta a la misma pregunta, el Gobierno menciona las medidas incluidas en la última ley educativa, del año 2020, más conocida como LOMLOE. Ya desde el preámbulo, se indica que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que los centros educativos “son instituciones privilegiadas para el bienestar de los niños y niñas” de forma que su bienestarnutricional en las escuelas “debe tener una importancia capital y sentar los cimientos para el bienestar de los menores”.
También mencionan cómo la Estrategia Mundial sobre Régimen Alimentario, Actividad Física y Salud insta a los Gobiernos “a adoptar políticas que apoyen un régimen alimentario saludable en las escuelas”. Destacan así que la promoción de la salud en la educación “contribuye a que los grupos de población más joven, independientemente de factores como clase social, género o el nivel educativo alcanzado por sus padres y madres u otras figuras parentales, desarrollen una vida más saludable”.
En la última ley educativa, el Gobierno insta a las administraciones educativas a promover la práctica diaria de deporte y ejercicio físico de los alumnos durante la jornada escolar
Por otra parte, la disposiciónadicional46 de la ley educativa fija que las administraciones educativas “adoptarán medidas para que la actividad física y la alimentación saludable formen parte del comportamiento infantil y juvenil, para fomentar y consolidar hábitos de vida saludables, y promoverán la práctica diaria de deporte y ejercicio físico por el alumnado durante la jornada escolar para favorecer una vida sana y autónoma, promover hábitos saludables de alimentación y la movilidad activa, con reducción del sedentarismo”.
LO PIDEN LOS PROFESIONALES
Una mejor actuación en materia alimentaria desde las escuelas también es una reivindicación que llega desde los profesionales sanitarios. Así lo ha compartido con ConSalud.es la Dra. Rosaura Leis, coordinadora de la Unidad de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica del Hospital Clínico Universitario de Santiago y coordinadora del Comité de Nutrición y Lactancia Materna de la Asociación Española de Pediatría (AEP).
Esta profesional sanitaria defendía que “si el menú del colegio escolar les enseña a nuestros hijos hábitos saludables, se les enseña a leer un buen etiquetado y como hacer un buen menú…” se conseguiría aumentar la adherencia a unos hábitos saludables.