En España hay diagnosticados alrededor de 150.000 pacientes con la enfermedad de Párkinson. Existe un tratamiento, la apomorfina en inyecciones intermitentes (APO-GO PEN), que permite rescatar al paciente de los denominados periodos off, donde el paciente se ve bloqueado y no puede moverse con normalidad.
Se calcula que actualmente alrededor de 500 pacientes en España utilizan este tratamiento entre otras cosas porque se administra con un simple pinchazo por el propio paciente, con un mecanismo similar al de un bolígrafo que puede llevar siempre encima, parecido a la forma en que los diabéticos se inyectan la insulina. Y tiene un efecto prácticamente inmediato.
Recientemente, el Ministerio de Sanidad ha publicado la nueva actualización del sistema de precios de referencia, bajando el precio de algunos medicamentos, entre ellos el APO-GO PEN. Esta modificación ha generado que el titular del mismo, Britannia Pharmaceuticals, haya trasladado su intención de retirar el medicamento de España por su no viabilidad económica.
El coste de traer el medicamento del extranjero es muy superior al su coste actual para el sistema sanitario
Esta medida ha provocado una situación de desabastecimiento del medicamento en las farmacias durante las últimas semanas, y tanto la comunidad médica como los pacientes, han expresado su malestar tanto al Ministerio como al laboratorio.
Actualmente no existe alternativa en España a este medicamento, por lo que se genera una laguna terapéutica, según reconocen tanto neurólogos como organismos oficiales. La solución que parece que da el Ministerio es la solicitud a través de 'Medicamentos en situaciones Especiales' (Medicamentos Extranjeros).
Esta medida deja sin medicación a cientos de pacientes en España ya que éste es un proceso complejo, tanto para médicos como para pacientes, que limita enormemente el acceso en la práctica a la mayoría de ellos.
Además, el coste de traer el medicamento del extranjero es muy superior al su coste actual para el sistema sanitario. Adicionalmente se añade el inconveniente de que el prospecto y la información estarán en un idioma diferente al español, con el riesgo de confusión para cuidadores y enfermos.