Las células de la piel reprogramadas para producir el neurotransmisor dopamina e insertadas en el cerebro de un hombre de 69 años con enfermedad de Parkinson le han permitido volver a realizar algunas de sus tareas cotidianas, informaron investigadores en The New England Journal of Medecine.
En el tratamiento experimental, iniciado hace dos años, se utilizaron las propias células de la piel del hombre para crear células nerviosas que liberan dopamina. La ventaja de usar las células propias reduce drásticamente el riesgo de rechazo por parte del sistema inmunitario. En total, se colocaron alrededor de 4 millones de células en tres puntos del cerebro involucrados en el movimiento.
El párkinson es una enfermedad progresiva que afecta a millones de personas en todo el mundo
Los investigadores indicaron que las células de la piel trasplantadas en ambos hemisferios del cerebro en distintos procedimientos quirúrgicos, espaciados en períodos de seis meses, continuaron produciendo la dopamina necesaria para aliviar los síntomas del Parkinson.
En una escala de calidad de vida de 157 puntos, donde las cifras más bajas indican menos problemas con el Parkinson, el paciente pasó de un puntaje inicial de 62 a 2 después de 24 meses.
El párkinson, una enfermedad progresiva que afecta a millones de personas en todo el mundo, produce temblores, rigidez y problemas para caminar y hablar a medida que las células productoras de dopamina en el cerebro se degeneran.