Hasta la fecha, son 25 las muestras de casos sospechosos de viruela del mono que se han enviado al Centro Nacional de Microbiología del ISCIII para su análisis. Así lo ha informado el Ministerio de Sanidad en un comunicado con la última actualización.
"La alerta por viruela símica se inicia el 18 de mayo en Reino Unido, con cuatro casos confirmados, y ese mismo día Portugal informaba también de cinco casos confirmados y unos 20 sospechosos", señalan desde Sanidad. A los casos ya conocidos, se han conocido hoy nuevas notificaciones en Italia y Suecia. Según la Agencia de Salud sueca, hay una persona infectada en la zona de Estocolmo, y el jefe de Salud de la Región del Lacio, Alessio D´Amato, ha anunciado un primer contagio registrado en el país.
Sanidad confirma que está valorando y analizando distintas opciones terapéuticas en función de su viabilidad y efectividad, tales como antivirales y vacunas
Ante este escenario, en el que cada vez se va incrementando el número de personas infectadas, desde el Ministerio destacan que están en contacto permantente con el resto de países afectados. Además, "de acuerdo a los procedimientos del Sistema de alerta precoz y respuesta rápida, se abrió una alerta a nivel nacional, se comunicó a la Ponencia de Alertas la situación y se ha avisado a todos los actores clave para garantizar una respuesta rápida, oportuna y coordinada", explican en el comunicado.
El ISCIII está empleando métodos de detección molecular mediante PCR en tiempo real (tecnología múltiplex de amplio espectro), más secuenciación genética del fragmento amplificado para hacer confirmación al 100%. La PCR permite un diagnóstico diferencial de la familia de ortopoxvirus (hay 4 tipos), y luego la secuenciación permite determinar si es o no viruela del mono.
DETECCIÓN Y TRATAMIENTO
La Ponencia de Alertas del CISNS ha elaborado un Protocolo para la detección precoz de casos. Este ayudará a garantizar la detección y el diagnóstico precoz de un posible caso de MPXV con el fin de adoptar de manera inmediata las medidas de control adecuadas para evitar la aparición de casos secundarios y se establece cómo identificar a los contactos y realizar el seguimiento de los mismos.
Respecto al tratamiento, desde Sanidad aclaran que todos los casos sospechosos que se están analizando presentan un cuadro leve. El Ministerio, a través de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, está valorando y analizando distintas opciones terapéuticas en función de su viabilidad y efectividad, tales como antivirales y vacunas.
Precisamente, la OMS informaba este jueves de que no se cuenta con tratamientos ni vacunas específicas contra la viruela del mono. En esta línea, expertos han apuntado una posible protección mediada a través de la vacuna de la viruela. Así, la Organización ha señalado que pueden contar con cierta protección los nacidos antes de 1980 que fueron vacunados contra la viruela.
Por su parte, el ECDC alertaba este jueves del "alto" riesgo de propagación de la viruela del mono en actividades sexuales. "Dada la frecuencia inusualmente alta de transmisión de persona a persona observada en este evento, y la transmisión comunitaria probable sin antecedentes de viajes a áreas endémicas, la probabilidad de una mayor propagación del virus a través del contacto cercano, por ejemplo, durante las actividades sexuales, se considera alto. La probabilidad de transmisión entre individuos sin contacto cercano se considera baja", apuntaba el organismo.