Un análisis reciente revela que la cantidad de casos de enfermedad renal crónica (ERC) en mujeres de todo el mundo casi se triplicó en las últimas tres décadas. Además, la diabetes tipo 2 y la hipertensión fueron las principales causas de muertes relacionadas con la ERC en mujeres. La investigación se presenta en la Semana Renal de la ASN2024 del 23 al 27 de octubre por parte del Instituto de Ciencias Médicas Adani de Gujarat, en la India. Se basó en el estudio Global Burden of Disease 2021, un esfuerzo integral para cuantificar la pérdida de salud en todo el mundo a lo largo del tiempo. El estudio incluye información de 204 países y territorios.
El estudio mostró un aumento alarmante de la tasa de mortalidad atribuible al factor de riesgo metabólico durante la última década
Entre 1990 y 2021, el cambio porcentual anual promedio en la prevalencia de la ERC en mujeres aumentó un 2,10%, la mortalidad un 3,39% y los años de vida ajustados por discapacidad un 2,48%. También ha habido disparidades significativas en la mortalidad y morbilidad relacionadas con la ERC en todo el mundo, con aumentos marcados observados particularmente en América Latina, América del Norte y entre los adultos mayores. El estudio mostró un aumento alarmante de la tasa de mortalidad atribuible al factor de riesgo metabólico durante la última década después de una ligera disminución entre 2000 y 2010.
"Esto requiere intervenciones políticas inmediatas, programas de prevención específicos e inversión en infraestructura de atención médica para frenar el aumento de la enfermedad renal crónica, en particular en las regiones de alto riesgo. Las campañas de concienciación pública sobre la importancia del diagnóstico temprano, los estilos de vida saludables y el tratamiento de enfermedades subyacentes como la diabetes y la hipertensión son fundamentales", apunta el autor principal Hardik Dineshbhai Desai, investigador clínico y de salud pública independiente del Instituto de Ciencias Médicas Adani de Gujarat. "Si no se toman medidas rápidas, el aumento continuo de la enfermedad renal crónica podría saturar los sistemas de atención médica y conducir a un aumento de la mortalidad y la morbilidad en todo el mundo", concluye.