El videoconsejo sanitario de #TuFarmacéuticoInforma de hoy, impartido por Iván Espada, se centra en la enfermedad de Alzheimer, que es la forma más común de demencia entre las personas mayores.
Tal y como explica el farmacéutico Iván España, es una enfermedad que afecta en primer lugar a las partes del cerebro que controlan el pensamiento, la memoria y el lenguaje lo que, en gran medida, afecta a la capacidad de llevar a cabo actividades cotidianas.
Normalmente se presenta a partir de los 60 años. En España, entre el 5 y el 8% de las personas mayores de 65 años padecen esta enfermedad. Además, es más común en mujeres que en hombres.
En España, entre el 5 y el 8% de las personas mayores de 65 años padecen esta enfermedad. Además, es más común en mujeres que en hombres
La progresión de la enfermedad de Alzheimer suele ser lenta y aunque actualmente no tiene cura —no existe un tratamiento que detenga su avance— sí que existen fármacos en nuestro arsenal terapéutico que consiguen ralentizar su evolución.
El deterioro cognitivo leve (DCL) es la fase previa a desarrollar el alzhéimer. Una fase con los síntomas del olvido normal debido al envejecimiento, pero que todavía no interfiere en el día a día de la persona. No obstante, conviene recalcar que no todos los pacientes que presentan este deterioro cognitivo leve acaban teniendo esta enfermedad.
Entre los síntomas tempranos, podríamos señalar los siguientes:
- Tener dificultades para recordar cosas que han pasado hace poco o no recordar el nombre de personas que se conocen.
- Se experimenta confusión y desorientación en lugares conocidos
- Se cambian los objetos de lugar o surgen dudas al hablar o escribir.
- Y se pueden apreciar también cambios de personalidad, pérdida de las habilidades sociales y pasividad en el estado de ánimo.
En una fase más avanzada nos encontramos con que las personas con alzhéimer:
- Dejan de hablar
- No reconocen a sus allegados
- Presentan incontinencia urinaria y fecal.
- Suelen despertarse por la noche, tener delirios, y olvidarrecuerdos de su propia vida.
- Además, pueden aparecer otras complicaciones como ansiedad, angustia, agresividad o depresión.
Se trata de una enfermedad en la que el paciente requiere de ayuda para realizar tareas esenciales y cotidianas, y en la que los familiares y cuidadores tieneny desarrollan un papel fundamental.
"Y recuerda, acude siempre al médico especialista y pregunta a tu farmacéutico de confianza. Él te informará sobre esta cuestión o cualquier otra duda que tengas", concluye Iván Espada.