La menopausia todavía es un tabú. Este proceso natural que se produce de media a los 50 años, cuando los ovarios pierden función folicular y disminuyen los niveles de estrógenos en sangre, es un momento por el que pasarán más del 90% de las mujeres, como señala el ‘Blog de la Unidad de la Mujer del Hospital Quirónsalud Zaragoza’. Sus síntomas pueden durar de 3 a 5 años, pero en algunos casos se alargan 10 o 12. Es un periodo que coincide, además, con el envejecimiento de las mujeres que a su vez puede ir asociado a diferentes problemas de salud que se han de abordar.
El estado de salud que presenten estas mujeres estará muy condicionado por su estilo de vida, su historial sanitario y reproductivo previo y factores ambientales, recoge la Organización Mundial de la Salud (OMS). Con todo, en la mayoría de los casos, pasarán por una serie de síntomas perimenopáusicos y posmenopáusicos que pueden perturbar la vida personal y profesional de las mujeres.
Dra. Cancelo sobre la menopausia: “Ahora mismo sus síntomas están sobre la mesa y se plantean tratamientos para su alivio”
Durante años estos síntomas eran acallados, bien por vergüenza o por la concepción cultural y social imperante sobre este fenómeno. De hecho, actualmente todavía existen deficiencias sobre el conocimiento de la menopausia y la necesidad de acceder a una atención médica en muchos países. Con todo, la situación ha ido cambiando, principalmente en occidente. “Antes la sintomatología relacionada con la menopausia no se manifestaba porque no se explicaba. Ahora mismo estos síntomas están sobre la mesa y se plantean tratamientos para su alivio”, explica la Dra. María Jesús Cancelo, jefa de Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Universitario de Guadalajara y vicepresidenta de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) a Consalud.es.
La calidad de vida de las pacientes se ha puesto en el foco del abordaje, de tal manera que en los últimos años han aparecido diversos tratamientos para reducir los sofocos, los sudores nocturnos o la sequedad vaginal, también para prevenir una de las consecuencias de este periodo: la osteoporosis y la pérdida de masa ósea relacionada con los cambios hormonales producidos por la menopausia. Del abanico se han pasado a tratamientos efectivos. “También se cuenta con más información y herramientas que nos permiten no solo tratarlos, sino prevenirlos”, destaca la Dra. Cancelo.
PREVENIR DESDE LA ADOLESCENCIA
Antes de que la edad vaya avanzando y de que asomen periodos asociados a ella como la menopausia o el envejecimiento, en la adolescencia, muchos años antes, se pueden prevenir los síntomas o su impacto en la vida diaria. “Desde pequeñas se pueden realizar medidas higiénico sanitarias para mejorar la masa ósea”, explica la experta. La toma de calcio, buena exposición a la vitamina D y ejercicio físico ha demostrado científicamente aportar una buena base para evitar la aparición de osteoporosis o fracturas cuando disminuyan los niveles de estrógenos en sangre.
La prevención se ha convertido en el objetivo de estudio actual de la menopausia. “Desde la SEGO lo que plantamos es que la prevención es fundamental. Cuando llegamos a la necesidad de tratamiento estamos ante una situación que podríamos haber evitado”, determina la Dra. Cancelo. En este sentido, en la consulta ginecológica están cada vez más integradas las medidas de prevención para que la menopausia por la que pasarán más del 90% de las mujeres sea un proceso que les afecte lo menos posible a su calidad de vida. Y, a su vez, se mejora la salud general de las pacientes.