2024 ha sido un año en el que se han conseguido grandes logros "en la lucha contra importantes desafíos sanitarios mundiales". Así lo afirma la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el balance publicado el pasado 23 de diciembre sobre los grandes hitos alcanzados durante este año. Y es que, como explica la entidad internacional, este 2024 ha sido un año de grandes avances en la eliminación de enfermedades, así como en mejoras en la calidad de vida en diversas regiones del mundo.
Durante este año, la OMS ha notificado hitos significativos como la erradicación de enfermedades tropicales desatendidas en siete países (Brasil, Chad, India, Jordania, Pakistán, Timor-Leste y Vietnam), destacando un esfuerzo internacional conjunto que ha confirmado el impacto positivo de las políticas de salud pública. La eliminación de patologías como la lepra, el tracoma y la filariasis linfática ha supuesto un antes y un después hacia una vida más saludable para millones de personas.
También durante estos 12 meses Egipto y Cabo Verde han logrado declararse libres de malaria tras décadas de lucha contra esta enfermedad. En paralelo, la región de las Américas ha sido reconocida como libre de sarampión, y Guinea ha conseguido la eliminación del tétanos materno y neonatal.
En el ámbito de las enfermedades transmisibles, Belice, Jamaica y San Vicente y las Granadinas han eliminado la transmisión de madre a hijo del VIH y la sífilis, mientras que Namibia ha avanzado hacia la erradicación de la transmisión de VIH y hepatitis B.
Por su parte, en cuanto a la inmunización, más de 17 países introdujeron nuevas vacunas, como la de malaria y una vacuna meningocócica polivalente, ambas prometen salvar miles de vidas anualmente.
Las enfermedades no transmisibles (ENT) y los problemas de salud mental han continuado siendo una carga global importante
Por otro lado, las enfermedades no transmisibles (ENT) y los problemas de salud mental han continuado siendo una carga global importante. Con millones de personas afectadas por afecciones cardiovasculares, cáncer y diabetes, la OMS ha instado a buscar una respuesta firme de cara a 2025 contra todos estos problemas de salud.
De hecho, la entidad debe seguir trabajando desde múltiples esferas. Un ejemplo es el del Informe Mundial sobre las Tendencias de la Prevalencia del Consumo de Tabaco, que demuestra que, aunque el tabaquismo global ha disminuido, la comercialización de productos de tabaco sigue afectando especialmente a los adolescentes y, por tanto, propiciando su consumo.
El informe de la OMS también ha confirmado que, otro de los problemas que persisten para el próximo año, es el impacto creciente de la inactividad física, con casi 1.800 millones de adultos en riesgo de desarrollar enfermedades crónicas. Esto, combinado con el aumento de la obesidad y la diabetes, refleja la urgencia de rediseñar sistemas de salud para promover estilos de vida saludables y equitativos. A nivel social, se han observado durante este 2024 progresos en la reducción de muertes por ahogamiento y en la lucha contra el alcoholismo y las adicciones, aunque estas áreas siguen requiriendo una atención prioritaria.
En respuesta a la resistencia antimicrobiana (RAM), la OMS y los líderes mundiales mantienen su objetivo de reducir las muertes relacionadas en un 10% para 2030, y ponen de manifiesto la amenaza global que representa este problema.
Las emergencias sanitarias derivadas de conflictos y desastres naturales en regiones como Gaza y Sudán han sido una prioridad para la organización durante este año
Asimismo, las emergencias sanitarias derivadas de conflictos y desastres naturales en regiones como Gaza y Sudán han sido una prioridad para la organización durante este año. Estos conflictos han puesto de relieve la necesidad de mejorar la preparación frente a futuras pandemias mediante acuerdos internacionales y reformas al Reglamento Sanitario Internacional (RSI).
El cambio climático y su impacto en la salud también han ocupado un lugar destacado en los planes de la OMS de este 2024. La Asamblea Mundial de la Salud ha adoptado resoluciones clave que instan a los países a alinear sus economías con estrategias sostenibles para mitigar los riesgos ambientales y fomentar la equidad social. Estos compromisos reflejan un reconocimiento creciente de que la salud pública y la sostenibilidad son objetivos interdependientes.
En cuanto a la transformación interna de la OMS, 2024 ha representado un hito con la primera ronda de inversiones destinadas a fortalecer las oficinas locales y diversificar la base de donantes. Esta estrategia busca empoderar a los países con recursos limitados para que desarrollen sistemas de salud más sólidos y resilientes. En paralelo, la inauguración de la Academia de la OMS en Lyon, puesta en marcha también durante estos meses, ha señalado el inicio de un ecosistema global de aprendizaje orientado a afrontar los desafíos sanitarios actuales y futuros.
"Los éxitos de la OMS en 2024 son motivo de orgullo que compartimos con todos nuestros socios y donantes que nos apoyaron durante el año. La OMS agradece a todos los Estados Miembros y otros contribuyentes, con especial agradecimiento a quienes realizan contribuciones totalmente flexibles para mantener una OMS sólida e independiente. Al acercarse el final del año, deseamos expresar nuestra profunda e incesante gratitud y admiración por los trabajadores de la salud y los cuidadores de todo el mundo", concluye el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.