El deterioro cognitivo leve es una etapa temprana de la pérdida sutil de la memoria así como de otras capacidades cognitivas como el lenguaje o la percepción visual y/o espacial. De acuerdo con el último informe anual de la Asociación de Alzhéimer de Estados Unidos, estos signos pueden manifestarse con la suficiente gravedad como para que sean percibidos por la persona afectada y su entorno, pero también de forma lo suficientemente leves como para que quienes lo sufren puedan continuar manteniendo las capacidades para desarrollar la mayoría de actividades de su vida cotidiana. Y es que muchas personas confunden estos problemas con el deterioro habitual asociado al envejecimiento, pero hablamos de cosas diferentes.
Según los datos recogidos en el referido informe alrededor de un tercio de las personas que padecen deterioro cognitivo leve desarrollan demencia como fase previa a la enfermedad de Alzheimer en los cinco años posterior al inicio de los síntomas.
Nos encontramos ante una problemática que puede manifestarse de múltiples formas. Algunas personas comienzan con problemas para recordar conversaciones o pensar con fluidez cuando están conversando con otras personas. Otras pueden experimentar problemas de orientación en lugares conocidos o no logran llevar a términos tareas cotidianas como, por ejemplo, pagar una factura. El informe incide en que en algunas personas estos problemas aumentan su gravedad con el paso del tiempo, mientras que otras pueden recuperar la normalidad en las funciones deterioradas.
El deterioro cognitivo leve es un problema sobre el que la población tiene poca información. Este fue el punto de partida del informe derivado de una encuesta que ha contado con la participación de más de 2.400 adultos y 801 profesionales médicos de Atención Primaria en Estados Unidos a finales de 2021.
“Ha sido todo un desafío validar que tanto la sociedad en general como los profesionales médicos de Atención Primaria se enfrentan al reto de distinguir entre el deterioro cognitivo leve y lo que se considera el envejecimiento normal”
Más del 80% no sabía lo que era el deterioro cognitivo leve, pero cuando se les explicó en qué consistía, alrededor del 40% de los participantes en la encuesta mostró su preocupación ante la posibilidad de desarrollarlo en un futuro,
“Ha sido todo un desafío validar que tanto la sociedad en general como los profesionales médicos de Atención Primaria se enfrentan al reto de distinguir entre el deterioro cognitivo leve y lo que se considera el ‘envejecimiento normal’”, declara Morgan Daven, vicepresidente de Sistemas de Salud de la Asociación de Alzheimer de Estados Unidos según recogen en CNN Health. “Estos resultados evidencian cuánto trabajo debemos hacer para continuar educando”.
Una de las conclusiones más llamativas de este estudio es que el 85% de los adultos participantes señalaron que querrían ser conocedores de forma temprana si desarrollaban alzhéimer. A pesar de esta elevada cifra, solo el 40% aseguró que buscaría ayuda profesional de forma inmediata si comenzaba a experimentar estos síntomas.
Los expertos aseguran que nos encontramos ante un término general más que frente a una condición de salud específica dados los múltiples factores en los que puede radicar su origen. En general, la amplia gama de síntomas y la falta de pruebas concretas para su diagnostico hacen que nos encontremos ante un auténtico desafío para los profesionales médicos.