El jugador de baloncesto Asier de la Iglesia ha recibido estos días la notificación de fichaje en un equipo francés, pero para sorpresa del deportista, una vez que se enteraron en ese club de que tenía esclerosis múltiple, han dado marcha atrás en su intención de que forme parte del equipo. Así lo ha comunicado de la Iglesia en su cuenta de Twitter reivindicando con ello la realidad a la que se deben enfrentar en su día a día las personas que padecen esta enfermedad.
"Animo a todas las personas que también viven con esclerosis múltiple a que no se escondan y cuenten su historia"
Asier de la Iglesia se ha convertido este año en el primer jugador de baloncesto con esclerosis múltiple que ha formado parte de la liga ACB. En los últimos meses ha utilizado su imagen como ejemplo de una persona con esta patología que realiza una vida completamente normal. Así lo ha expuesto con su participación en campañas de concienciación sobre la esclerosis múltiple.
“Cuando en 2012 me diagnosticaron esclerosis múltiple le dieron un nombre a los síntomas que estaba teniendo, pero no a mi futuro. Sigo pensando que todavía no se conoce lo suficiente esta enfermedad y eso dificulta que se empatice con nuestra realidad. Por eso, animo a todas las personas que también viven con ella a que no se escondan y cuenten su historia”, cuenta de la Iglesia.
Según el Informe Mundial sobre el Empleo y la Esclerosis Múltiple, el 43% de las personas con la enfermedad ha dejado el empleo en los tres años siguientes al diagnóstico. Este porcentaje se eleva al 70% a los diez años de ser diagnosticado. En comparación con los datos de estudios anteriores correspondientes a 2010, estos resultados son más optimistas.
De hecho, menos personas han reducido su jornada laboral o se han tomado una baja temporal en comparación con el informe de 2010. También más personas han afirmado no necesitar cambiar sus horarios de trabajo respecto a los datos obtenidos con anterioridad. Las conclusiones revelan que los cambios y las adaptaciones efectivas en los lugares de trabajo podrían ayudar a que más personas con esclerosis múltiple sigan trabajando.