Las enfermedades reumáticas tienen un mal pronóstico para los próximos años. En concreto, si hablamos de la artrosis, se prevé que casi mil millones de personas sufran esta forma más común de artritis en 2050. Además, en las tres últimas décadas esta enfermedad ya ha aumentado considerablemente, marcada por diversos factores que están directamente relacionados.
Esta tendencia creciente se puede apreciar en diversas investigaciones. Una de ellas la publicada en ‘The Lancet Rheuatology’ que confirma este aumento significativo cada tres décadas. Mientras en 1990, 256 millones de personas sufrían artrosis, en 2020 la cifra ascendió a casi 600 millones. Por esta razón se estima que 2050, el número de personas afectadas por esta patología se acerque a los 1.000 millones.
Dentro de esta enfermedad, las rodillas y las caderas son las zonas más afectadas por la artrosis, en las que recae gran parte del peso y que sirven como punto de apoyo de la columna. En este mismo estudio también se calculó el incremento de casos de artrosis de rodilla que, según confirma en declaraciones a ConSalud.es la Dra. Montserrat Romera, portavoz de la Sociedad Española de Reumatología (SER), “aumentará un 74,9% en 2050”.
“Las personas con obesidad tienen casi 7 veces más posibilidades de sufrir artrosis que las personas con peso normal”
Este incremento puede estar motivado por múltiples factores, aunque la portavoz de la SER destaca dos en concreto: “El crecimiento y el envejecimiento de la población”. Sin embargo, como afirma la experta, es una suma de factores genéticos y ambientales. Más allá de la edad, condiciones como la obesidad también pueden aumentar las probabilidades de sufrir esta patología. “Las personas con obesidad tienen casi 7 veces más posibilidades de sufrir artrosis que las personas con peso normal”, subraya Romera.
Como señala el estudio, si pudiera hacerse frente a la obesidad de manera eficaz en todo el mundo, la incidencia de la enfermedad disminuiría. En concreto, ‘The Lancet’ asegura que la artrosis caería en un 20%. Es por este motivo por el que la obesidad desempeña cada vez más un papel esencial en el desarrollo de otras patologías.
“En la mayoría de estudios realizados se ha observado que la artrosis es más frecuente en mujeres que en hombres”
Por otro lado, el factor sexo también condiciona la aparición o no en mayor medida de la enfermedad. Por ahora, se mantiene el pronóstico de que la artrosis, en general, es una enfermedad femenina. “En la mayoría de estudios realizados se ha observado que la artrosis es más frecuente en mujeres que en hombres”, sostiene la doctora. En el citado anteriormente se estima que el 61% de las personas que sufren esta enfermedad son mujeres, frente al 39% de los hombres.
En cualquier caso, cuando esta patología afecta a los pacientes, independientemente de su edad o condición física, y tal y como explica la reumatóloga, aparecen síntomas como el dolor, la rigidez de la articulación, la deformidad y la disminución o pérdida de la movilidad. Toda esta sintomatología “influye en la calidad de vida de las personas que la padecen”, insiste la Dra. Romera.
RECOMENDACIONES PARA UN MEJOR PRONÓSTICO
Más allá de los factores que condicionan la aparición de la enfermedad, también existen recomendaciones que pueden mejorar el pronóstico de la artrosis en general y de la artrosis de rodilla en particular. “El ejercicio general aeróbico, adaptado a cada paciente, es una medida importante que debería incorporarse en su día a día”, asegura la doctora.
“Los programas de ejercicios para potenciar la musculatura y preservar la movilidad son importantes porque mantienen la coordinación neuromuscular, previenen la atrofia muscular y conservan la resistencia de tendones y ligamentos”, añade Romera.
“La dieta Mediterránea puede tener un efecto protector por sus propiedades antiinflamatorias y por su efecto sobre la obesidad”
Por último, algunas investigaciones centran su atención en la nutrición que “puede tener un papel beneficioso en el manejo de la artrosis”, declara la especialista. “La dieta Mediterránea puede tener un efecto protector por sus propiedades antiinflamatorias y por su efecto sobre la obesidad”, sentencia.