El aneurisma cerebral es una enfermedad cerebrovascular causada por la dilatación de un vaso sanguíneo del cerebro. Esa dilatación es ocasionada por un debilitamiento de la pared de dicho vaso, generando así un riesgo de rotura que podría tener fatales consecuencias para el individuo. Pero aun siendo un problema cerebrovascular, ¿existe un factor hereditario que aumente las probabilidades de sufrir la enfermedad?
La Dra. Mª del Mar Freijo, coordinadora del Grupo de Estudio de Enfermedades Cerebrovasculares de la Sociedad Española de Neurología (SEN), explica para ConSalud.es que “no es lo más habitual”, aunque sí que en algunos casos puede aparecer un aneurisma asociado a determinadas enfermedades o en grupos familiares. De hecho, en pacientes en los que ha habido dos o más miembros de la familia afectados, sí que se practican pruebas de diagnóstico por imagen, como resonancias (angio-resonancia) y en algunos casos incluso como seguimiento para detectar su aparición.
Del mismo modo, estas personas deben seguir unas recomendaciones para minimizar los riesgos y prevenir. La doctora señala dos fundamentales: evitar el tabaco y la hipertensión, ya que son los factores principales de riesgo vascular que ocasionan, especialmente en el caso de la hipertensión arterial, el debilitamiento de las paredes de los vasos sanguíneos. Y, por lo tanto, conlleva un mayor riesgo de rotura de los vasos sanguíneos. También recomienda moderar el consumo de aquellas sustancias que aumentan la tensión, como por ejemplo, la sal o el café, así que controlar la dieta y la medicación será fundamental en estas personas.
"Toda circunstancia que pueda dar lugar a una elevación de la tensión arterial puede favorecer un aneurisma o puede aumentar las probabilidades de que se rompa"
El objetivo con todas estas medidas es reducir la presión con la que viaja la sangre por los vasos sanguíneos, ya que es lo que precisamente puede provocar la dilatación de los mismos. A mayor presión, mayor dilatación tendrá una pared débil y, consecuentemente, mayor riesgo de rotura asociado. Esa dilatación de un vaso sanguíneo se muestra como un pequeño abultamiento, que es lo que conocemos como aneurisma cerebral.
Cuando los aneurismas están diagnosticados y son grandes o existe un elevado riesgo de rotura, se valora si se trata de forma preventiva, bien con cirugía o con procedimientos endovasculares, como puede ser un cateterismo. En este caso, se introduce un catéter a través de la ingle y se llega hasta el vaso del cerebro. Si se llega a producir una hemorragia cerebral por la rotura del aneurisma, el tratamiento consistiría en la cirugía o un procedimiento endovascular que impida el resangrado.
CONSUMO DE ESTEROIDES, ¿FACTOR DE RIESGO?
Hace poco conocíamos el caso de Jo Lindner, un influencer alemán dedicado al culturismo que fallecía a los 30 años a causa de un aneurisma cerebral. Muchos seguidores se preguntaban si el consumo excesivo de esteroides anabólicos podría estar detrás de su fatal desenlace, aunque su pareja, la fisioculturista Nicha, informaba de que una tía de Lindner había perdido la vida por la misma causa 4 años atrás. Además del posible factor congénito, la Dra. Freijo refiere: “Toda circunstancia que pueda dar lugar a una elevación de la tensión arterial puede favorecer un aneurisma o puede aumentar las probabilidades de que se rompa y provoque una hemorragia cerebral”.