El Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos de la Unión Europea (Rasff) ha emitido una alerta alimentaria para advertir de la presencia de aflatoxinas por encima de los niveles permitidos, en almendras procedentes de Estados Unidos. Estas toxinas, producidas por el hongo 'Aspergillus', aumentan el riesgo de padecer cáncer.
Las aflatoxinas son un tipo de toxinas producidas por ciertos hongos en cultivos agrícolas como el maíz, la semilla de algodón o los frutos secos. Principalmente, estas toxinas se deben al Aspergillus flavus y Aspergillus parasiticus, los cuales son abundantes en las zonas cálidas y húmedas del planeta. Estos hongos, además, pueden contaminar los cultivos tanto en los campos como durante la cosecha o el almacenamiento.
Las aflatoxinas son un tipo de toxinas producidas por ciertos hongos en cultivos agrícolas como el maíz, la semilla de algodón o los frutos secos
Cuando consumen productos contaminados, las personas pueden exponerse a estas toxinas, aunque los agricultores y otros trabajadores agrícolas pueden estar expuestos al inhalar el polvo generado durante el manejo y el procesamiento de cultivos y alimentos contaminados. Esto es una situación problemática, debido a que la exposición se relaciona con un mayor riesgo de cáncer de hígado.
En humanos, se ha atribuido a las aflatoxinas múltiples episodios de intoxicaciones masivas con producción de hepatitis aguda en distintas zonas de la India, Sudeste Asiático y África tropical y ecuatorial, y un factor de agravamiento de enfermedades producidas por la malnutrición.
También son posibles responsables, junto a otros factores, de la elevada tasa de cáncer hepático observado en algunas de esas zonas. Desde 1988, la OMS considera a la aflatoxina B1 como un carcinógeno para el hombre. Generalmente, se puede reducir la exposición a estas sustancias comprando solo marcas conocidas de productos. Además, los productos mohosos, con color anormal o resecos deben ser desechados.
Las aflatoxinas resisten los tratamientos habituales de los alimentos. En el caso de determinados productos, como los cacahuetes, los frutos de cáscara, los frutos secos y el maíz, está demostrado que los métodos de selección u otros tratamientos físicos permiten reducir el contenido de aflatoxinas. Existen cuatro aflatoxinas principales, conocidas como aflatoxina B1, aflatoxina B2, aflatoxina G1 y aflatoxina G2.
Ante la alerta, FACUA-Consumidores en Acción ha criticado que el sistema Rasff no ofrezca información sobre la empresa productora ni la zona donde se han cultivado las almendras
España emitió la alerta el pasado 4 de abril al sistema Rasff, que la ha calificado como un riesgo “serio” para la salud, y se ha restringido su distribución en España. Ante la alerta, FACUA-Consumidores en Acción ha criticado que el sistema Rasff no ofrezca información sobre la empresa productora ni la zona donde se han cultivado las almendras. Los análisis se han realizado en un control de fronteras.
En este aspecto, ha apuntado que la escasa información publicada por Comisión Europea siembra la sospecha sobre todas las almendras procedentes de Estados Unidos, puesto que no da detalles ni sobre la empresa productora, ni sobre la zona del país en la que se han cultivado.