Una de cada cuatro personas padecerá algún trastorno mental a lo largo de su vida, y más de la mitad de ellos surgirán antes de los 14 años, según Aldeas Infantiles SOS. Con motivo del Día Mundial de la Salud Mental (10 de octubre), la organización recuerda que la salud mental infantil es la gran olvidada del sistema sanitario español y reclama medidas para garantizar el acceso a este servicio de todos los niños, especialmente aquellos que viven en situación de vulnerabilidad.
“La prevención y la detección de los factores de riesgo que puedan desencadenar ciertas enfermedades mentales, así como la intervención temprana para evitar que estas se agudicen es fundamental durante los primeros años de vida”, explica Pedro Puig, presidente de Aldeas Infantiles SOS.
Los profesionales de las unidades de salud mental no cuentan con la formación específica ni el tiempo necesario para tratar a niños y adolescentes
Sin embargo, según apunta la organización, los especialistas de primer nivel, generalmente pediatras, no pueden hacer frente a esta demanda por falta de recursos. Asimismo, los especialistas de segundo nivel, de las unidades de salud mental, atienden a pacientes de todas las edades, por lo que tampoco cuentan con la formación específica necesaria ni con el tiempo para atenderles.
Como consecuencia de esta situación, las escasas unidades de salud mental para niños y adolescentes están colapsadas y quedan reservadas para casos especialmente complejos, por lo que no cubren todas las necesidades existentes.
El resultado de todo esto es un exceso en la prescripción de fármacos sin psicoterapia, lo que da una falsa percepción de intervención.
La ansiedad y la depresión son las enfermedades mentales más comunes en España, seguidas del trastorno bipolar, la esquizofrenia o algunas otras formas de psicosis. Además, entre los jóvenes de 15 a 29 años, el suicidio es la segunda causa de muerte, por detrás de los accidentes de tráfico.
La mitad de los niños del sistema de protección de España está recibiendo algún tipo de tratamiento de salud mental
Aunque se establezca que alrededor de uno de cada cuatro personas sufrirá una enfermedad mental a lo largo de su vida, esta cifra aumenta si nos centramos en los colectivos más vulnerables. De los casi 48.000 niños y niñas que crecen en el sistema de protección en España, es decir, privados del cuidado parental, la mitad de ellos está recibiendo algún tipo de tratamiento de salud mental.
Según Aldeas Infantiles SOS, muchos de estos niños han compartido experiencias traumáticas similares, como el maltrato físico, psicológico o el abuso. “Cuando un niño está expuesto a este tipo de situaciones durante un tiempo prolongado es mucho más fácil que llegue a desarrollar algún tipo de enfermedad mental”, explica Pedro Puig.
El aislamiento social, las quejas somáticas, la ansiedad, la depresión, los problemas de atención o la conducta disruptiva son algunas de las enfermedades que pueden padecer. Aldeas Infantiles SOS reclama de manera urgente medidas como el incremento de los presupuestos destinados a la salud mental, la coordinación entre los equipos de atención primaria y de salud mental, la incorporación de la especialidad de Psiquiatría Infantil y campañas de sensibilización, entre otras.