El uso excesivo del aire acondicionado, que aumenta en verano con la llegada de las altas temperaturas, puede tener un impacto negativo en la salud. Con motivo de la ola de calor que está viviendo España estos días, el Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Universitario de Torrejón recuerda que estos aparatos empleados para refrescarse pueden afectar de forma negativa, especialmente a las vías respiratorias.
La mitad de las casas en España cuentan con uno de estos aparatos de aire acondicionado. Además, el porcentaje aumenta en aquellas regiones que sufren temperaturas más extremas en verano. Sin embargo, esta situación no se reduce solo a los hogares, sino que los aparatos se encuentran presentes también en centros comerciales, oficinas, medios de transporte o centros sanitarios.
Lorena Sanz: “Los aparatos de refrigeración expulsan frío y ocasionan alteraciones en los sistemas de defensa naturales de la nariz y garganta"
“Los aparatos de refrigeración expulsan frío y ocasionan alteraciones en los sistemas de defensa naturales de la nariz y garganta, provocando que los cilios pierdan movilidad y que la circulación normal de la mucosa se vuelva más lenta o incluso cese por completo”, explica la Dra. Lorena Sanz, jefa del Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Universitario de Torrejón.
El abuso de los aires acondicionados, según explican desde el Hospital de Torrejón, puede incrementar los problemas de garganta durante los meses de más calor del año. "Las faringitis y las laringitis se convierten, cada vez más, en una enfermedad habitual del verano debido a las variaciones de temperatura entre espacios cerrados, las altas temperaturas de la calle y el abuso del uso de los aires acondicionados”, añade la doctora.
Así, el aire acondicionado puede producir molestias en la garganta, que se caracterizan por carraspeo, aclaramiento faríngeo, sensación de sequedad, quemazón y tos persistente. De este modo, el sistema respiratorio se ve afectado por el uso inadecuado del aire acondicionado.
Los problemas de salud asociados a estos aparatos se deben a que los ambientes fríos y secos favorecen la irritación de las mucosas y la faringe. Además, resecan la garganta y provocan una inflamación del tejido faríngeo con granulación en la pared de la garganta. "En los casos más graves, puede desembocar en una bronquitis o neumonía”, añade la doctora.
Los problemas de salud asociados a estos aparatos se deben a que los ambientes fríos y secos favorecen la irritación de las mucosas y la faringe
En caso de que se vaya a utilizar el aire acondicionado, Lorena Sanz recomienda que se mantenga la temperatura entre 22 y 26 grados. De este modo, se evitarán problemas en la zona de cabeza y cuello. A su vez, recuerda la importancia de mantener una buena hidratación para paliar la sequedad en el ambiente, incluso con el uso de humidificadores en casa o en la oficina.
Finalmente, una dieta equilibrada, las medidas higiénicas como el lavado de manos, limpiar regularmente el filtro del aire acondicionado y no apuntar el aire directamente al cuerpo son otras medidas que ayudarán a mantener la garganta en perfecto estado durante el verano y sus olas de calor.