El proceso de inmunización de la sociedad ante múltiples enfermedades infecciosas ha ido mejorando durante el paso de los años gracias al desarrollo de las vacunas. La Organización Mundial de la Salud (OMS) describe la inmunización como “la base del sistema de atención primaria de salud y un derecho humano indiscutible”. Sin embargo, todavía existe una gran parte de la población que tiene acceso insuficiente. Unos 67 millones de niños se quedaron sin vacunar total o parcialmente entre 2019 y 2021, cayendo los niveles de cobertura de inmunización en 112 países, influenciados por la pandemia. Cifras muy preocupantes que recogen en el informe 'Estado Mundial de la Infancia 2023: Para cada infancia, vacunación', presentado por Unicef este jueves con motivo de la Semana Mundial de la Inmunización.
Desde Unicef advierten que este es el mayor retrocesosostenido de la inmunización infantil de los últimos 30 años y recalcan la necesidad de tomar medidas urgentes para ponerse al día con las dosis olvidadas en el camino y continuar con el objetivo de prevenir brotes de enfermedades mortales. "Redoblar el compromiso, aumentar la financiación de la inmunización y evitar que la vacunación sistemática se convierta en otra víctima de la pandemia", señalan como claves en el proceso.
Tanto Unicef como la OMS coinciden en que la pandemia de Covid-19 ha tenido un efecto claro en las bajas cifras de inmunización registradas en los últimos años
De los 67 millones de niños, 48 millones no tuvieron ni una sola vacuna sistemática, un factor conocido como "cero dosis". La causa constituye uno de los puntos en los que se detiene el informe de la OMS, donde señala la terrible situación que se vive en las comunidades más pobres, remotas y marginadas, que suelen tener un difícil acceso. Una teoría que se confirma con los países en los que presentan el mayor número de personas con cero dosis: India, Nigeria, Birmania y Filipinas.
Tanto Unicef como la OMS coinciden en que la pandemia de Covid-19 ha tenido un efecto claro en las bajas cifras de inmunización registradas en los últimos años. La magnitud de lo vivido con el SARS-CoV-2 provocó un gran aumento en la presión de los sistemas de salud, debido principalmente al desvío de los recursos dedicados a la inmunización hacia la vacunación contra la Covid-19, la escasez de personal sanitario y las medidas de confinamiento en el hogar. Un panorama que desencadenó el retroceso de vacunación en sarampión, difteria, polio u otras enfermedades.
Sin embargo, la pandemia también ha recordado al mundo el poder que tienen las vacunas para combatir enfermedades y, en definitiva, salvar vidas y crear un mañana más saludable, seguro y próspero. Retos futuros que pasan por la creación de sistemas de inmunización sólidos para garantizar que todo el mundo esté protegido no solo contra el COVID-19, sino también ante otras enfermedades.
AGENDA DE INMUNIZACIÓN 2030
La OMS, Unicef, Alianza Global para la Vacunación (Gavi, por sus siglas en inglés) y otros aliados internacionales desarrollaron una nueva visión y estrategia global, denominada Agenda de Inmunización 2030 (IA2030), para abordar estos desafíos durante la próxima década y tratar de salvar más de 50 millones de vidas.
Esta iniciativa se fundamenta sobre la idea de que todas las personas,en todas partes las partes del mundoy con cualquier edad, se beneficien plenamente de las vacunas. Un documento basado en los éxitos de la implementación del Plan de Acción Europeo de Vacunas 2015-2020 y en las enseñanzas de lo ocurrido con la Covid-19, una combinación que trata de ofrecer una solución para recuperarse de las interrupciones de estos últimos años.
Poder lograr una cobertura global de las inmunizaciones del 90% y reducir a la a mitad el número de menores que no reciben vacunas
A través del Marco de Acción IA2030, diseñado para que los países lo adapten a su contexto local y para que se revise a lo largo de la década a medida que surjan nuevas necesidades, señalan cuatro elementos operativos críticos que permiten una traducción exitosa de la Agenda: estrategias regionales y nacionales que prioricen acciones para la planificación operativa; mecanismos para garantizar la apropiación y la rendición de cuentas; marcos para guiar y monitorizar la implementación del país; y la comunicación y promoción para crear los mensajes necesarios y reforzar las acciones requeridas.
Desde la OMS y Unicef han pedido el compromiso de gobiernos, donantes, industria farmacéutica y científicos, para poder lograr una cobertura global de las inmunizaciones del 90% y reducir a la a mitad el número de menores que no reciben vacunas. Además de los retos que surjan en el camino.