La Asociación Española de Enfermería Pediátrica junto con el apoyo de otras sociedades científicas de enfermería y de pediatría ha lanzado la campaña ‘Donde haya un niño, debe haber una enfermera pediátrica’ apoyada por la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap).
Se trata de una iniciativa que va dirigida al Ministerio de Sanidad, con la que se quiere destacar la importancia de que los niños tengan acceso a una atención sanitaria especializada y de calidad, para lo que señala la necesidad de integrar a los y las especialistas en enfermería pediátrica en los centros de Atención Primaria de todas las Comunidades Autónomas.
La Dra. Carmen Fidalgo, secretaria de la Junta Directiva de AEPap cuenta cómo este es uno de los fines de la AEPap. "El concepto de buen trato a la infancia, clave en su protección, no es sólo la ausencia de maltrato. Es la promoción del máximo desarrollo integral biopsicosocial en su entorno”, explica. En este contexto, “los niños y niñas tienen el derecho legal y moral a la mayor y mejor atención sanitaria que se les pueda proporcionar”, añade la Dra. Fidalgo.
La experta de AEPap destaca que el sistema sanitario español es el ‘hospitalocentrista’ y ‘adultocentrista’
Sin embargo, expone un problema del sistema sanitario español como es el ‘hospitalocentrismo’ y ‘adultocentrismo’, "la infancia y la adolescencia compiten por los recursos sanitarios con los adultos, cuando no debería ser así, pues tienen reconocido internacionalmente el derecho a una protección especial”, asegura. Por lo que se incluye la participación de los profesionales mejor formados, entre los que se encuentran los pediatras de Atención Primaria y también el personal de enfermería pediátrico.
“Para AEPap es fundamental que la población infantojuvenil tenga acceso a unos cuidados sanitarios especializados, humanizados y de calidad, por personal cualificado para ello. Esto no se consigue sin que toda la infancia y adolescencia de nuestro país tenga un pediatra de atención primaria y una enfermera pediátrica que como equipo multiprofesional vele por su salud integral”, explica la Dra. Fidaldo. “Sólo así la asistencia sanitaria infantojuvenil en el nivel asistencial de primaria será equitativa y de la máxima calidad”, afirma.
Además, recuerda que la Declaración Universal de los Derechos del Niño es “el tratado más ratificado de la historia” y, entre los derechos que promulga “se encuentra el de la protección especial para que los menores puedan crecer física, mentalmente y socialmente sanos y libres”, conlcuye.