La Asociación Española contra la Meningitis (AEM) ha pedido este lunes 6 de septiembre a la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que escuche a los expertos e incluya la vacuna contra la meningitis B en el calendario vacunal de forma uniforme.
La organización realiza esta petición tras la publicación, por primera vez, de un estudio realizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), que demuestra la efectividad de la vacuna contra la meningitis en niños menores de cinco años y "abre la puerta" a su inclusión en el calendario de vacunación.
En esta línea la presidenta de AEM, Cristina Regojo, pide a la titular de Sanidad que se reúna con estos expertos para conocer de cerca las conclusiones del estudio y enfrentar los desafíos actuales y futuros de esta enfermedad que es letal en la infancia o puede dejar graves secuelas que afectarán en el desarrollo de su vida.
“Evitar secuelas y muertes entre nuestros recién nacidos debería ser innegociable. El informe constata que los casos de meningitis han crecido en las capas sociales más desfavorecidas. Según el poder económico de la familia, así se han protegido a los bebés españoles desde el 2015”
El fármaco, que comenzó a inocularse en España en 2015 de forma privada, ya está incluido en los calendarios de vacunación de tres comunidades autónomas (Castilla y León, Canarias y Andalucía) y, según ha avanzado el estudio, la eficacia probada hace que se "abra la puerta" para que se haga extensible en el resto de regiones. Sin embargo, para que se adopte esta decisión, las administraciones deberán hacer, "un cálculo coste-beneficio", ya que se trata de una vacuna cara.
“Evitar secuelas y muertes entre nuestros recién nacidos debería ser innegociable. El informe constata que los casos de meningitis han crecido en las capas sociales más desfavorecidas. Según el poder económico de la familia, así se han protegido a los bebés españoles desde el 2015”, ha destacado la portavoz de la asociación
Para la asociación su petición está muy en línea con las políticas del Gobierno porque tiene ‘mirada a la infancia desfavorecida’, la que no puede permitirse vacunar a sus hijos que se encuentran ‘desprotegidos’, y supone poner a España en línea de los objetivos de la Organización Mundial de la Salud, OMS, de erradicar la enfermedad en 2030.