El Hospital Universitario 12 de Octubre y la Universidad Complutense de Madrid lideran un estudio que concluye que un 84,6% de los pacientes al año de sufrir un infarto no cumplen con al menos una de las tres medidas terapéuticas de prevención secundaria (dieta, actividad física y medicación). Además, esta recogida de datos señala que ser mujer, la carga de los cuidados familiares, la diabetes, la depresión o el sobrepeso podrían estar detrás de esa falta de adherencia.
Además, al año de recibir el alta hospitalaria el 67,1% de los pacientes no toma adecuadamente la medicación, el 43,24% no come adecuadamente siguiendo las indicaciones de la dieta mediterránea, y un 28,6% de los pacientes no realiza actividad física o, de hacerla, es leve. Así lo confirman los datos del trabajo publicado en American Journal of Preventive Cardiology.
Entre los factores que influyen en la falta de adherencia está la carga de cuidados familiares, la presencia de diabetes mellitus, la depresión, ser mujer o tener enfermedad renal crónica
También hay otros factores que influyen en que los pacientes con infarto agudo de miocardio no se adhieran a estas medidas. Son múltiples, pero los investigadores destacan la carga de cuidados familiares, la presencia de diabetes mellitus, la depresión, ser mujer, tener enfermedad renal crónica y tener un índice corporal elevado o sobrepeso/obesidad.
“La adherencia a algunas de estas medidas de prevención parece estar asociada a aspectos socioculturales como el género, ya que las mujeres son las que tradicionalmente tienen asignados roles del cuidado familiar. Además, ser mujer se ha asociado específicamente en este estudio con mayor riesgo de no adherencia a las recomendaciones de actividad física”, destaca Guillermo Moreno, investigador en la Facultad de Enfermería, Fisioterapia y Podología de la UCM y en el Instituto de Investigación del Hospital 12 de Octubre i+12.
En este estudio, llevado a cabo en el Servicio de Cardiología del Hospital 12 de Octubre, participaron 503 pacientes con infarto agudo de miocardio tratados con una intervención coronaria percutánea. Además, se hizo un seguimiento telefónico de los pacientes a los 6 meses y a los 12 meses tras el alta, y se midió la adherencia a las medidas farmacológicas y no farmacológicas –dieta y actividad física- utilizando tres cuestionarios.
También se crearon modelos estadísticos por edad, sexo y tipo de infarto para identificar los factores de riesgo de no adherencia a cada una de las medidas y a la combinación de estas. Además, también se contabilizó el número de ingresos hospitalarios de cada paciente tras el alta a través de la historia clínica electrónica, con los que se construyeron modelos estadísticos para predecir el riesgo diferencial de hospitalización entre pacientes adherentes y no adherentes.
En línea con esta última medición se puede concluir que el 7,1% de los pacientes que cumplen con las tres medidas de prevención secundaria tienen al menos una hospitalización al año del alta, frente a un 17,1% de los que no cumplen con al menos una de las tres recomendaciones.
"Cuanto antes identifiquemos a los pacientes más oportunidades tendremos de prevenir y será mejor el pronóstico"
“Este estudio nos ha permitido conocer cuáles son los predictores de riesgo de no adherencia a cada una de las medidas de prevención secundaria, lo que nos va a permitir identificar precozmente a los pacientes de mayor riesgo de no adherencia. Cuanto antes identifiquemos a los pacientes más oportunidades tendremos de prevenir y será mejor el pronóstico”, concluye Guillermo Moreno.
En este estudio, además del Instituto de Investigación del Hospital 12 de Octubre i+12 y de la Universidad Complutense de Madrid, también han participado el CIBER de Enfermedades Cardiovasculares y el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC).