La lucha contra el tabaco es una de las principales prioridades sanitarias mundiales. En 2030 se ha puesto la meta de reducir hasta el 5% la prevalencia de fumadores y llegar, ese año, a la primera generación sin tabaco. La realidad, sin embargo, es que el consumo no termina de disminuir y en jóvenes es importante, (un 33,2% señalan un consumo al menos mensual) con un inicio medio de 16,5 años, según la última Encuesta sobre Alcohol y otras drogas en España (EDADES 2022).
La irrupción en el mercado y en la publicidad de los cigarrillos electrónicos, con aditivos atrayentes para los adolescentes, supone también un problema cada vez mayor. En tres años el porcentaje de niños entre 14 y 18 años que habían probado un vapeador pasó del 20 al 48%, según el Ministerio de Sanidad.
Ante esta realidad la Asociación Española Contra el Cáncer y 11 entidades sociales especializadas en jóvenes (Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes, el Consejo de la Juventud de España, FAD Juventud, Federación de Scouts-Exploradores de España, Fundación Lo Que De Verdad Importa, Fundación Ricky Rubio, Plataforma Juvenil de España, Plataforma de Infancia, Talento Para el Futuro, Red Española de Universidades Saludables) han emitido un comunicado dirigido a los partidos políticos para que los programas electorales del 23 de julio contemplen soluciones para esta problemática.
"El objetivo de nuestra demanda es proteger a la población en general de los efectos nocivos del tabaco y sus nuevos productos, haciendo un especial énfasis en los menores"
En concreto, las asociaciones solicitan medidas "concretas" para proteger a los menores y adolescentes del tabaco y sus derivados que constituyen actualmente la "principal causa de enfermedades y muertes evitables en Europa y en todo el mundo", argumentan, con más de 8 millones de muertes al año asociadas a su consumo. Además, su cultivo suponen un factor perjudicial para el medio ambiente con daños ecológicos estimados en 600 millones de árboles y 200.000 hectáreas de tierra destruidos, 22.000 millones de toneladas de agua consumidas y 84 millones de toneladas de CO2 emitidas.
"El objetivo de nuestra demanda es proteger a la población en general de los efectos nocivos del tabaco y sus nuevos productos, haciendo un especial énfasis en los menores", indican en el comunicado el colectivo. Para ello desarrollan una serie de necesidades en las que se centra, entre otros puntos, la exposición al humo en medios y plataformas digitales, que se han convertido "en la principal vía de normalización de los nuevos dispositivos". De hecho, debido a ello, actualmente el 91,3% de los jóvenes han estado expuestos a una forma de inhalación de humo.
MEDIDAS QUE SOLICITAN
En la carta emitida a las entidades políticas, la AECC y las asociaciones dirigidas a la población joven pide erradicar todas las formas de publicidad y promoción del tabaco y de los nuevos productos de tabaco (incluidos los productos relacionados con y sin nicotina) de plataformas audiovisuales, redes sociales y otros canales dirigidos a menores, "así como la regulación de los espacios de venta de estos productos para limitar su acceso a los menores".
Además, inciden en la necesidad de garantizar un marco legislativo adecuado que proteja a los niños, niñas y adolescentes del tabaco y de sus nuevos productos "impidiendo su consumo, reduciendo su atractivo y accesibilidad", concluyen.