¡Muchas gracias, guapa!… esta frase que escucha continuamente cualquier enfermera de nuestro país resume perfectamente la “cara y la cruz” de cómo siguen viendo nuestra profesión una inmensa mayoría de personas.
Por un lado, reconocen el trabajo que estamos realizando por ellos pero, al mismo tiempo, lo minusvaloran al no atribuirlo a una profesional que está ejerciendo de forma autónoma su labor en base a los conocimientos adquiridos sino a una mujer que, de manera servicial, atiende sus demandas por indicación de otros.
El problema no es en sí de la persona que así se refiere a una enfermera sino de nuestra sociedad en su conjunto que mantiene arraigada una visión de nuestra profesión directamente vinculada a estereotipos antiguos y sexistas.
Una realidad ante la que los cerca de 300.000 enfermeras y enfermeros de nuestro país venimos rebelándonos desde hace muchos años porque, además de irreal e injusta, supone un freno muy importante a nuestro avance y desarrollo como profesionales de Sistema Sanitario español.
"El problema no es en sí de la persona que así se refiere a una enfermera sino de nuestra sociedad en su conjunto que mantiene arraigada una visión de nuestra profesión directamente vinculada a estereotipos antiguos y sexistas"
Nos rebelamos todos los días y, especialmente, el 12 de mayo, Día Internacional de la Enfermería, cuando, con mayor fuerza si cabe, decimos a todos los ciudadanos lo que realmente somos y hacemos por ellos a lo largo de toda su vida. A los ciudadanos y también a las administraciones públicas y empresas sanitarias privadas, las cuales no valoran convenientemente, en muchas ocasiones, nuestra labor.
Este año, además de mostrar nuestro orgullo por ser enfermeras y enfermeros, desde SATSE hemos querido poner el foco de atención en todas aquellas imágenes, comentarios y conductas que, como decía, perpetúan “clichés” desfasados y dañinos para todos y cada uno de nosotros, no solo como profesionales sino también como personas.
“Rompe los estereotipos” es el lema de la campaña que hemos puesto en marcha días atrás y que esperamos que suponga un paso más en el reconocimiento de nuestro profesión. Somos muy conscientes de que acabar con la percepción social que hay detrás del “muchas gracias, guapa” no es tarea fácil pero también estamos firmemente convencidos de que finalmente lo conseguiremos.
"Y sí, a tí, que lees ahora estas palabras, te pido también que tengas presente cómo nos sentimos cuando vemos o escuchamos ciertas imágenes y comentarios y actúes en consecuencia"
Lo lograremos si contamos con la ayuda de medios de comunicación, como el que ha tenido a bien publicar este artículo, porque todos y cada uno de ellos juegan un papel decisivo a la hora de formar una opinión en torno a cualquier actividad profesional.
Y sí, a tí, que lees ahora estas palabras, te pido también que tengas presente cómo nos sentimos cuando vemos o escuchamos ciertas imágenes y comentarios y actúes en consecuencia.
De todos, administraciones, empresas, medios de comunicación, ciudadanos… depende que el profesional que te cuidó, la amiga que es enfermera o el hijo de tu primo que quiere serlo constate que su esfuerzo, entrega y dedicación es valorado como se merece. Ni más ni menos.
Manuel Cascos, presidente del Sindicato de Enfermería, SATSE