El objetivo principal de la sanidad tanto pública como privada es el paciente. Si podemos mejorar el sistema de salud para redundar en su bienestar, estamos obligados a hacerlo. La interoperabilidad y digitalización de la sanidad es una tarea pendiente dentro del sistema de salud español.
Un sistema de salud plenamente interoperable permitiría a los profesionales sanitarios trabajar de manera más eficaz, acceder a los datos clínicos de sus pacientes cuando los necesitan y, de este modo, se evitarían duplicidades en pruebas, consultas, y se acelerarían diagnósticos y tratamientos. En conclusión, la atención al paciente y, por tanto, su bienestar mejoraría considerablemente.
"Hasta la fecha, solo la Comunidad de Madrid permite compartir la historia clínica entre entidades públicas y privadas promoviendo la colaboración entre las mismas"
Cabe recordar que, en España, el Ministerio de Sanidad, en su Estrategia de Salud Digital establece como una de sus tres grandes líneas de actuación la “Generalización de la interoperabilidad de la información sanitaria”. La Estrategia habla de la creación de un “Espacio Nacional de Datos Sanitarios”, cuya ejecución dependería del propio Ministerio, en colaboración con las Comunidades Autónomas.
Sin embargo, hasta la fecha, solo la Comunidad de Madrid permite compartir la historia clínica entre entidades públicas y privadas promoviendo la colaboración entre las mismas. Así lo aprobó el pasado mes de diciembre a través de una modificación de la Ley de Ordenación Sanitaria introducida en la denominada “Ley Ómnibus”. Un paso decisivo para alcanzar la interoperabilidad entre el sistema sanitario público y privado que el resto de Comunidades Autónomas deberíanempezar a poner en marcha para conseguir la tan necesaria digitalización del sistema sanitario.
La posibilidad de poder compartir el historial clínico supone un importante ahorro para todos los sujetos y entidades implicadas, ya sean pacientes, Administraciones públicas o instituciones privadas.Es por ello que debemos animar a todas las Comunidades Autónomas a extender la posibilidad de comenzar compartiendo el historial clínico como ya se hace en la Comunidad de Madrid para garantizar un mejor servicio a los pacientes y comenzar a dar pasos sólidos hacia la interoperabilidad y digitalización del sistema sanitario español.