“Ya era hora”. Esta es solo alguna de las frases que se escuchan dentro del sector salud ante el anuncio del cese “a petición propia y por motivos personales” de la responsable de la Dirección General de Cartera Común de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia, Patricia Lacruz.
Si de algo puede presumir la ya “ex” del Ministerio es de estar detrás de algunos de los mayores errores protagonizados por Sanidad y cuyos grandes perjudicados han sido siempre los pacientes. De hecho, cuatro ministros han tenido que pasar por el Ministerio de Sanidad (Carmen Montón, María Luisa Carcedo, Salvador Illa y Carolina Darias) para dar fin a una etapa salpicada por las polémicas.
El criticado visado EPOC y el intento de desfinanciación de los SYSADOA, junto a que España solo financie el 53% de los medicamentos innovadores frente al cáncer, con un tiempo medio de más de 500 días desde que un nuevo medicamento es aprobado por las autoridades europeas hasta que está disponible para su uso en nuestro país, son solo algunos de los lamentables legados de Lacruz, que han puesto en riesgo a pacientes muy vulnerables.
Así ha sido el caso de los afectados por Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, que de la mano de Apepoc han tenido que luchar por mejorar el acceso a los fármacos mediante la retirada del visado pese a la inicial negativa de Lacruz. Finalmente y después de haber sufrido de primera mano las consecuencias de la pandemia, lograron su objetivo.
A esta traba por parte de la exdirectora del Ministerio se suma el intento de desfinanciación de los SYSADOA, fármacos de acción sintomática lenta para el tratamiento de la artrosis y única alternativa terapéutica para estos pacientes. La presión y el importante trabajo realizado por la Fundación Internacional de Pacientes con Artrosis (OAFI) derivaba a la postre en la marcha atrás de su desfinanciación.
Pero no solo la dificultad de acceso a la innovación ha sido la gran protagonista de la ‘gestión Lacruz’, los nombramientos que han rodeado a la Dirección General también han estado acompañados de graves polémicas, tal y como ocurrió en 2021 con el concurso-oposición para el cargo de asesor en la Subdirección General de Farmacia. Desde CSIF criticaron la insistencia de Lacruz para que ocupara dicho cargo Dolores Fraga.
Y como guinda al pastel, hasta su propio nombramiento en 2020 estuvo rodeado de controversia. ConSalud.esse hacía eco en exclusiva de la situación de irregularidad en la que se encontraba Lacruz, tras ser nombrada en marzo para la Dirección General de la Cartera Común del SNS y de Farmacia sin que este se ajustase a derecho. Tras ocho meses en los que este error administrativo estuvo afectando notablemente a las decisiones tomadas por Lacruz, en noviembre el Gobierno regularizaba su situación a través de un Real Decreto.
Tanta metedura de pata dice ahora adiós con la esperanza de una nueva etapa en la Dirección General, cuyo mando recae en César Hernández García. El sector espera que el mejor talante del sucesor borre la lamentable gestión de la ya pasada 'era Lacruz'.