2022 ha sido un año particularmente especial para GSK España, ya que se han cumplido 30 años desde que inauguramos oficialmente nuestro centro de I+D de Tres Cantos (Madrid). En 1992 abrimos las puertas del primer centro privado español – y uno de los pocos del mundo – dedicado en exclusiva a la investigación y desarrollo de nuevos tratamientos para, entre otras, la malaria y la tuberculosis, dos enfermedades infecciosas que cada año son causantes de millones de muertes. Desde entonces más de 140 investigadores, de los que el 64% son mujeres, han trabajado para convertirnos en un referente mundial en la búsqueda de nuevos medicamentos para hacer frente a las enfermedades que afectan a los países en desarrollo.
Durante estas tres décadas dedicadas a la Salud Global hemos trabajado sin descanso para adelantarnos a la enfermedad y poder hablar de todas estas enfermedades en pasado e impedir que continúen golpeando a las poblaciones más vulnerables del planeta. Ejemplos de ello son el desarrollo del primer tratamiento en 60 años frente a la malaria recurrente ocasionada por Plasmodium vivax y nuestros avances en áreas como el de la tuberculosis, campo en el que desde 2020 lideramos uno de los mayores proyectos científicos para acelerar el desarrollo de antibióticos contra la tuberculosis (ERA4TB y Unite4TB).
Además, algo que diferencia a nuestro centro de I+D es su modelo de funcionamiento basado en la innovación abierta que facilita el intercambio de información, el acceso a nuevas tecnologías y la colaboración entre distintos grupos como modo de trabajar. En GSK fuimos pioneros en esta aproximación en el año 2010 y, de hecho, prácticamente todos nuestros proyectos se llevan a cabo en colaboración con otros grupos externos a la compañía. A través de la Fundación Tres Cantos Open Lab, nuestro centro de I+D acoge a decenas de investigadores de los más prestigiosos laboratorios de prácticamente todo el mundo para trabajar con nosotros en el desarrollo de sus investigaciones, siempre relacionadas con enfermedades de países en desarrollo. Este año celebramos el pasado, pero sobre todo miramos hacia el futuro.
En GSK fuimos pioneros en esta aproximación en el año 2010 y, de hecho, prácticamente todos nuestros proyectos se llevan a cabo en colaboración con otros grupos externos a la compañía
Nuestra flexibilidad y responsabilidad con seguir aportando a la investigación de nuevas enfermedades quedó patente con la transformación en 2020 de parte de nuestro centro para ayudar a hacer frente a la pandemia de la COVID-19. Pero nuestro compromiso en España con el I+D en enfermedades de países en desarrollo continuará creciendo y seguiremos trabajando día a día para hacer posibles otros 30 años más de contribución a la investigación y desarrollo frente a enfermedades que asolan a los países en desarrollo.