A medida que envejecemos, nuestro cuerpo cambia y con él, nuestras necesidades.El sueño es uno de los aspectos que se ve alterado con la edad. “Cuando nos hacemos mayores, las horas de sueño se reducen, por eso lo que debemos intentar es que aunque sean cada vez menos horas, sean de calidad”, explica a ConSalud.es el coordinador nacional de los técnicos de animación sociocultural de Ballesol, Luis López. En otras palabras, “es mejor dormir cinco horas de calidad, que estar nueve horas en la cama dando vueltas sin descansar”.
En las personas mayores, el hecho de no tener un “ritmo constante diario”, puede favorecer que al final del día “no estén cansados” y por tanto, “le den muchas vueltas a la cabeza y no descansen, y eso es lo que trae el insomnio”, apunta López. En este sentido, es fundamental trabajar para crear buenos hábitos de sueño que garanticen el buen descanso de nuestros mayores. Y aquí, los técnicos de animación sociocultural juegan un papel clave.
“Cuando nuestros residentes entran en los centros Ballesol, es el momento de empezar a ofrecerles un envejecimiento saludable mediante motivación y estímulos. Es el momento de que hagan lo que nunca han hecho antes, que se dediquen tiempo a sí mismos y se diviertan”, comenta este animador. Las actividades sociales y culturales permiten que los residentes estén entretenidos, fomenten las relaciones sociales entre ellos y se sientan acompañados. Todo ello repercute en un mejor estado de ánimo general y un aumento de su bienestar y descanso, lo cual redunda en última instancia en una mejor calidad de vida.
Y es que eliminar las preocupaciones, el estrés y la ansiedad, es esencial para conseguir una buena rutina de sueño, siempre que vaya acompañado de buenos hábitos. Al hilo, López recuerda la importancia de que las personas mayores tomen conciencia de los beneficios de llevar una buena rutina de sueño.
"Cualquier locura que se te pueda pasar por la mente y te motive, a ellos les va a motivar también. No son gente diferente, solo son personas mayores y tienen inquietudes culturales"
Crear un ambiente relajado en la habitación, evitar tomar bebidas excitantes antes de ir a la cama o seguir horarios, son algunas de las recomendaciones de los expertos para conseguir un buen descanso. “Esto les va a ayudar a que, cuando entren en la cama, de verdad sea para recargar pilas”, insiste el coordinador nacional de los técnicos de animación sociocultural de Ballesol.
"OTRO TIPO DE OCIO"
No solo las actividades sociales y culturales favorecen un mejor descanso y un incremento de la calidad de vida, sino que “el sentido de la pertenencia a un grupo ayuda a retrasar demencias y enfermedades como el Alzheimer”. En esta línea, Luis López defiende que aunque están muy bien las actividades “de toda la vida” como el bingo, dominó o las cartas, los residentes de hoy en día “demandan otro tipo de ocio”.
“Intentamos que Ballesol ofrezca algo innovador en el tema de la animación. Hemos hecho campeonatos con la Wii, bolos, obras de teatro, coros, disfraces, desfiles, documentales, gafas de realidad virutal… Un montón de barbaridades”. Y es que “cualquier locura que se te pueda pasar por la mente y te motive, a ellos les va a motivar también. No son gente diferente, solo son personas mayores y tienen inquietudes culturales”, explica López, añadiendo que además, los mayores agradecen el tiempo y el cariño dedicado a estas actividades.
Asimismo, estas actividades fomentan las relaciones entre residentes, “creando una gran familia”. De esta forma, se consigue que cuando estén solos, los mayores sigan compartiendo momentos e inquietudes entre ellos. “Crear esa convivencia tan bonita es algo muy gratificante que conseguimos todos los departamentos trabajando unos con otros”.
“Es muy agradecido trabajar con los residentes, porque en comparación de lo que yo les puedo ofrecer a ellos, lo que ellos me dan a mí es mucho más”, concluye Luis López con una sonrisa en los ojos que no puede esconder detrás de la mascarilla.