Los resultados del ensayo fase III 'PROpel' han mostrado que 'Lynparza' (olaparib), de MSD y AstraZeneca, en combinación con abiraterona y prednisona o prednisolona, mejora la mediana de supervivencia global de 42,1 meses frente a 34,7 meses para abiraterona más placebo en cáncer de próstata metastásico resistente a la castración (CPRCm).
Este resultado representó una diferencia absoluta de 7,4 meses en la mediana de la supervivencia global frente a un tratamiento de referencia. Si bien este aumento numérico en la mediana de la supervivencia global no fue estadísticamente significativo, esta actividad clínica se sumó a la supervivencia lograda para los pacientes en este contexto tratados con abiraterona sola, tratamiento de referencia actual.
Estos resultados se han anunciado en una presentación oral en el Simposio sobre cánceres genitourinarios (GU) de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO, por sus siglas en inglés) de 2023.
El director de Desarrollo Clínico Global y director médico de MSD Research Laboratories, Eliav Barr, ha recordado que el cáncer de próstata es "el segundo más frecuentemente diagnosticado en pacientes con asignación de sexo masculino al nacer, y se estima que la mortalidad casi se duplicará en los próximos 20 años".
"Para pacientes con asignación de sexo masculino al nacer se estima que la mortalidad casi se duplicará en los próximos 20 años"
"Con opciones de tratamiento limitadas para estos pacientes, reconocemos la necesidad crítica de terapias que puedan retrasar la progresión de la enfermedad. Estamos orgullosos de nuestra colaboración con AstraZeneca mientras trabajamos juntos para avanzar en las revisiones regulatorias pendientes y ofrecemos una nueva opción de tratamiento a la comunidad del cáncer de próstata", ha añadido.
Por su parte, la vicepresidenta ejecutiva de I+D en Oncología de AstraZeneca, Susan Galbraith, ha señalado que "tanto PARP, como el receptor de andrógenos son importantes en el proceso de reparación del ADN en el cáncer de próstata".
"Los resultados en la población general del ensayo ilustraron cómo la combinación puede aprovechar la dependencia del receptor de andrógenos en la reparación del ADN por parte de PARP, para proporcionar una mayor actividad anticancerosa que la abiraterona sola. Basándose en la totalidad de los datos, hay que destacar que esta combinación brindó un beneficio en una amplia población de pacientes en este contexto, lo que se ve respaldado aún más por la reciente indicación aprobada en la UE", ha remachado.