El Papa Francisco ha asegurado que un mundo que "descarta a los enfermos" y "que no ayuda a quienes no pueden permitirse cuidados" es un "mundo cínico y no tiene futuro" tras advertir de que "la salud no es un lujo". El pontífice ha hecho estas declaraciones en una audiencia privada en el Vaticano con representantes de la Federación Nacional de las Órdenes de Técnicos Sanitarios de Radiología Médica y de Profesiones Sanitarias Técnicas, de Rehabilitación y Prevención.
Francisco ha dado las gracias por el compromiso y dedicación de los sanitarios especialmente durante "los últimos tres años" de pandemia. "Los profesionales sanitarios han vivido una experiencia muy especial, difícil de imaginar, la de la pandemia. Ya se ha dicho antes, pero no hay que olvidarlo: sin su compromiso y su trabajo muchos enfermos no se habrían curado", ha señalado el Pontífice.