Un proyecto de la Universidad de Zaragoza plantea incorporar insecticidasen materiales plásticos de ropa y calzado, con la finalidad de evitar picaduras de mosquitos y otros insectos que puedan transmitir enfermedades como el dengue, la malaria o el chikungunya. Esta aplicación puede resultar de gran trascendencia especialmente en países tropicales donde este tipo de mosquitos tienen una amplia presencia.