La prestigiosa revista Forbes le ha elegido como el joven menor de 30 años más influyente en el área de Salud de toda Europa, es subdirector médico del Clínico de Zaragoza y ha conocido de primera mano la lucha del Ébola en Sierra Leona. Todo esto con tan sólo 29 años. César Velasco Muñoz representa una nueva generación de médicos, que lucha por lo que le gusta; en su caso, laSalud Pública y la Epidemiología, y que se esfuerza por innovar y desarrollar nuevos proyectos.
¿Cómo ha recibidola noticia de ser elegido por la revista Forbes como uno de los jóvenes menores de 30 años más influyentes de Europa?
Con gran sorpresa y mucha alegría, y también con humildad. Es un reconocimiento a una carrera cortita pero de mucho esfuerzo, de muchas ganas de hacer mi trabajo. No obstante, todavía queda mucho recorrido; tengo que seguir trabajando duro.
En definitiva, esto representa a los jóvenes españoles y a toda una generación de profesionales sanitarios, que con su esfuerzo intenta que la salud sea mejor día a día.
Una generación de profesionales, qué no lo ha tenido fácil, ¿no?
Yo estoy muy contento de que el ranking de Forbes esté encabezado por alguien del campo de la Salud Pública y de la Epidemiología; es un cambio de paradigma completo. Normalmente estas listas contaban con perfiles profesionales diferentes.
Sobre la marcha del talento, ¿tiene muchos compañeros que se han tenido que marchar fuera?
Forbes destaca de usted “su espíritu innovador” y su afán por fundar “nuevos proyectos desafiantes”, ¿qué valoración hace de estas calificaciones?
Yo creo que sí. Me gusta mucho pensar fuera de la caja (“out of the box”), en soluciones distintas. Me gusta también escuchar a las personas que llevan muchos años trabajando. Hay que buscar nuevas alternativas y apoyarse en la innovación, ya que tener nuevos proyectos es muy importante en el mundo de la salud.
¿Y qué proyectos tiene entre manos actualmente?
En Aragón, en el centro de investigación sanitaria, hay una oferta fuerte de innovación. Nuestro hospital y yo, en concreto, estoy muy involucrado. Por ejemplo, se está trabajando en un nuevo producto sanitario, que, de momento, no puedo citar, ya que esta en búsqueda de financiación para cubrir una patente.
También me interesan mucho los proyectos de Responsabilidad Social Corporativa, trabajar con asociaciones de emprendeduría social e intentar que ese tiempo libre que tenemos sea para hacer el mundo mejor.
Con un currículum tan importante con tan sólo 29 años, ¿hacia dónde quiere dirigir su carrera profesional?¿Cuáles son sus aspiraciones profesionales?
Seguir mejorandola salud de las personas día a día en España, y conseguir que la sociedad crea en los proyectos de los jóvenes. Por supuesto, para ello es esencial que haya más inversión en salud, que nos contrate la gente que esté preocupada por la salud de las personas y mantener la excelencia en los hospitales.
Es especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, ¿qué le llevó a elegir dicha especialidad?
Yo soy una de esas excepciones, creo mucho en ellas. Considero que hay que hacer lo que uno quiere y le apasiona. A lo largo de la carrera fui cambiando de opinión sobre la especialización que quería hacer, pero hubo un momento en que pensé que lo que más me gustaba era la Medicina Preventiva. En quinto de carrera me fui a la Universidad Autónoma de Barcelona mediante una beca Séneca. En las clases de salud poblacional, internacional y global pensé que podía tener más impacto como médico si me dedicaba a esta área. Además, esta especialidad tiene una parte clínica muy bonita, con vacunas, infección nosocomial, etcétera. Y a nivel de salud pública y de epidemiología merecía la pena.
De hecho, la elegí como primera opción. Fui de los que salí con lágrimas en los ojos porque había cogido la especialidad que quería.
Ha trabajado en la Organización Mundial de la Salud en la división creada para contener el Ébola en Sierra Leona, ¿qué valoración hace de ese trabajo? ¿Y de la gestión del Ébola?
He tenido la oportunidad de vivir el trabajo del Ébola en dos organizaciones. En primer lugar, en la Agencia Europea, que pertenece a la Comisión Europea. Allí tuve la oportunidad de vivir la visión europea de la contención de la enfermedad y de desarrollar unas guías tutoriales de protección individual. De hecho, tuve una buena idea durante mi estancia allí, que consistió en desarrollar manuales basados en la imagen y de aprendizaje por Internet. Con este trabajo,pude desarrollar esa visión más de salud pública internacional.
A su vez, ocupar un cargo tan relevante en un hospital como el de subdirector médico y tener sólo 29 años puede ser complicado en el día a día con especialistas de más edad, ¿le ha supuesto a usted algún problema su juventud?
Para mi aceptar este puesto fue un reto y, por eso, lo acepté. Además, me parece admirable que la Sanidad pública tenga la capacidad de atraer talento así. Lo digo con mucha humildad, pero hay que saber reconocer a la directora médica del hospital su “atrevimiento” de contar conmigo en el puesto.
Porque salud necesitamos todos... ConSalud.es
¿Cómo ha recibidola noticia de ser elegido por la revista Forbes como uno de los jóvenes menores de 30 años más influyentes de Europa?
Con gran sorpresa y mucha alegría, y también con humildad. Es un reconocimiento a una carrera cortita pero de mucho esfuerzo, de muchas ganas de hacer mi trabajo. No obstante, todavía queda mucho recorrido; tengo que seguir trabajando duro.
En definitiva, esto representa a los jóvenes españoles y a toda una generación de profesionales sanitarios, que con su esfuerzo intenta que la salud sea mejor día a día.
Una generación de profesionales, qué no lo ha tenido fácil, ¿no?
Estoy muy contento de que el ranking de Forbes esté encabezado por alguien del campo de la Salud Pública y de la Epidemiología
Ni lo hemos tenido fácil ni lo tendremos. Tienen que cambiar muchos las cosas. Crecer profesionalmente requiere de mucho esfuerzo. Supone salir de una universidad pública e ir haciéndose un hueco con formación nacional e internacional para ser competitivo. También requiere de becas y de apoyo para que dicha actividad se lleve a cabo.Yo estoy muy contento de que el ranking de Forbes esté encabezado por alguien del campo de la Salud Pública y de la Epidemiología; es un cambio de paradigma completo. Normalmente estas listas contaban con perfiles profesionales diferentes.
Sobre la marcha del talento, ¿tiene muchos compañeros que se han tenido que marchar fuera?
Espero que todos los jóvenes podamos tener un hueco en el país que nos ha formado
Sí, represento a una generación que conoce lo que es marcharse fuera. Muchos hemos tenido que salir para hacernos un currículum competitivo. Yo he tenido la suerte de que el Clínico ha confiando en mí, pero hay mucha gente que no ha tenido esta oportunidad. Espero que podamos seguir trabajando porque esto mejore, y que tengamos todos un hueco en el país que nos ha formado. Forbes destaca de usted “su espíritu innovador” y su afán por fundar “nuevos proyectos desafiantes”, ¿qué valoración hace de estas calificaciones?
Yo creo que sí. Me gusta mucho pensar fuera de la caja (“out of the box”), en soluciones distintas. Me gusta también escuchar a las personas que llevan muchos años trabajando. Hay que buscar nuevas alternativas y apoyarse en la innovación, ya que tener nuevos proyectos es muy importante en el mundo de la salud.
¿Y qué proyectos tiene entre manos actualmente?
En Aragón, en el centro de investigación sanitaria, hay una oferta fuerte de innovación. Nuestro hospital y yo, en concreto, estoy muy involucrado. Por ejemplo, se está trabajando en un nuevo producto sanitario, que, de momento, no puedo citar, ya que esta en búsqueda de financiación para cubrir una patente.
También me interesan mucho los proyectos de Responsabilidad Social Corporativa, trabajar con asociaciones de emprendeduría social e intentar que ese tiempo libre que tenemos sea para hacer el mundo mejor.
Con un currículum tan importante con tan sólo 29 años, ¿hacia dónde quiere dirigir su carrera profesional?¿Cuáles son sus aspiraciones profesionales?
Seguir mejorandola salud de las personas día a día en España, y conseguir que la sociedad crea en los proyectos de los jóvenes. Por supuesto, para ello es esencial que haya más inversión en salud, que nos contrate la gente que esté preocupada por la salud de las personas y mantener la excelencia en los hospitales.
Es especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, ¿qué le llevó a elegir dicha especialidad?
Yo soy una de esas excepciones, creo mucho en ellas. Considero que hay que hacer lo que uno quiere y le apasiona. A lo largo de la carrera fui cambiando de opinión sobre la especialización que quería hacer, pero hubo un momento en que pensé que lo que más me gustaba era la Medicina Preventiva. En quinto de carrera me fui a la Universidad Autónoma de Barcelona mediante una beca Séneca. En las clases de salud poblacional, internacional y global pensé que podía tener más impacto como médico si me dedicaba a esta área. Además, esta especialidad tiene una parte clínica muy bonita, con vacunas, infección nosocomial, etcétera. Y a nivel de salud pública y de epidemiología merecía la pena.
De hecho, la elegí como primera opción. Fui de los que salí con lágrimas en los ojos porque había cogido la especialidad que quería.
Ha trabajado en la Organización Mundial de la Salud en la división creada para contener el Ébola en Sierra Leona, ¿qué valoración hace de ese trabajo? ¿Y de la gestión del Ébola?
He tenido la oportunidad de vivir el trabajo del Ébola en dos organizaciones. En primer lugar, en la Agencia Europea, que pertenece a la Comisión Europea. Allí tuve la oportunidad de vivir la visión europea de la contención de la enfermedad y de desarrollar unas guías tutoriales de protección individual. De hecho, tuve una buena idea durante mi estancia allí, que consistió en desarrollar manuales basados en la imagen y de aprendizaje por Internet. Con este trabajo,pude desarrollar esa visión más de salud pública internacional.
De mi experiencia en Sierra Leona he de decir que los profesionales tienen mucho que aportar a nivel técnico
Luego de allí me marché al terreno. De mi experiencia en Sierra Leona he de decir que los profesionales tienen mucho que aportar a nivel técnico. Había gente con una capacidad increíble de trabajo. Estaban dando lo mejor de sí mismos. La experiencia profesional y personal fue dura, pero muy satisfactoria. Respecto a la organización, hay que hacer lo que se pueda como se pueda en el momento posible. En este sentido, la respuesta del Ébola se ha hecho de la mejor manera posible. Además, hay que destacar el desarrollo tan rápido de vacunas que se ha llevado a cabo y en el que se está investigando. A su vez, ocupar un cargo tan relevante en un hospital como el de subdirector médico y tener sólo 29 años puede ser complicado en el día a día con especialistas de más edad, ¿le ha supuesto a usted algún problema su juventud?
Me parece admirable que la Sanidad pública tenga la capacidad de atraer talento así
Creo que las personas tienen miedo a lo nuevo y es normal. Yo creo que es bueno combinar talentos y generaciones. Y en esta línea, la sanidad pública está haciendo una apuesta por lo nuevo, por lo joven y por el talento. Evidentemente es muy enriquecedor trabajar con gente que tiene más años de trabajo. Para mi toda la gente del hospital es mi equipo. Considero que los hospitales son un equipo y que es importante tener una visión conjunta para trabajar conjuntamente. Para mi aceptar este puesto fue un reto y, por eso, lo acepté. Además, me parece admirable que la Sanidad pública tenga la capacidad de atraer talento así. Lo digo con mucha humildad, pero hay que saber reconocer a la directora médica del hospital su “atrevimiento” de contar conmigo en el puesto.
Porque salud necesitamos todos... ConSalud.es