El Dr. Manuel Mirón es el presidente de la Sociedad Española de Hospitalización a Domicilio (Sehad) y jefe de servicio de la Unidad de Hospitalización a Domicilio del Hospital Universitario de Torrejón, en Madrid.
Es una reconocida figura de la Hospitalización a Domicilio (HAD), tanto en el apartado clínico como cientíco, a nivel internacional. Además, realiza actividades de investigación de gran trascendencia, como la coordinación del Grupo de Trabajo de Hospitalización y Telemedicina de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) o del Registro Nacional de Tratamiento Antimicrobiano Domiciliario Endovenoso (Registro TADE), y la actividad docente, ya que ejerce como profesor en la Universidad Francisco de Vitoria y ha coordinado varias actividades formativas relacionadas con la hospitalización domiciliaria.
ConSalud.es charla con él para conocer un poco mejor cómo es este modelo asistencial que se está implantando en España.
¿Cómo afronta el reto de liderar esta sociedad científica?
Con mucha ilusión y muchos proyectos que tenemos que sacar adelante. La Sociedad Española de Hospitalización a Domicilio (Sehad) es una organización pequeña con 350 socios y relativamente joven.
Seguiremos en la línea de estos últimos años, con una hoja de ruta trazada por la anterior directiva y que pone al paciente en el centro de los cuidados.
¿Qué objetivos tienen? ¿La pandemia ocupará parte de estos retos?
Nuestro pilar fundamental es mejorar el bienestar del paciente frente a las enfermedades utilizando un gran aliado como es el domicilio de los propios enfermos. Nosotros consideramos que la atención en el domicilio tiene un efecto beneficioso sobre los pacientes y queremos seguir ampliando ese modelo asistencial centrado en las personas.
Asimismo, buscamos contribuir a la mejora en la gestión de los recursos del hospital. Sabemos que con esta pandemia hay unas limitaciones, un máximo de capacidad que se puede ver superado en determinadas circunstancias y queremos contribuir a que el uso de estos recursos sea lo más eficiente posible. Por ejemplo, que las camas de hospitales de agudos se destinen para aquellas personas que están graves y tengan necesidad y liberando recursos a través de la hospitalización a domicilio.
¿La humanización también sería otro pilar fundamental para los profesionales que trabajan en este ámbito?
Efectivamente. Nosotros tratamos de mejorar la experiencia del paciente y su satisfacción con la atención recibida. Por eso la humanización es clave, la llevamos en el ADN profesional. Entendemos que la Medicina especializada o de ámbito hospitalario llevada al domicilio del paciente tiene unas condiciones muy distintas al entorno del hospital.
Estar en sus casas nos permite percibir como se sienten las personas cuando están enfermas, atenderles desde la cercanía informándoles y escuchándoles… Se da una relación de igual a igual entre el profesional y el enfermo. Nosotros como sanitarios entramos en terreno desconocido y el paciente se siente en mayor confianza porque está en su casa.
"La hospitalización a domicilio lleva bastantes años implantada desde los años 80, pero tanto su implantación como el desarrollo fue muy lento y heterogéneo"
¿Cómo está siendo la implementación de este modelo asistencial en España?
La hospitalización a domicilio lleva bastantes años implantada desde los años 80, pero tanto su implantación como el desarrollo fue muy lento y heterogéneo.
Algunas comunidades autónomas le han dado un cierto impulso y extendiendo la hospitalización a domicilio de forma más o menos generalizada en sus servicios de salud, acercándola a un alto porcentaje de la población. En cambio, otras no han apostado por ello, solamente algunas iniciativas cercanas a este modelo asistencial. Y esto último es lo que desde la sociedad científica estamos intentando cambiar.
¿Qué papel ocupa la tecnología?
La tecnología es fundamental, un gran aliado para nosotros. Aunque visitamos al paciente unas dos horas al día, el resto del tiempo no sabemos qué le está pasando al paciente a no ser que nos llame. Por eso estamos incorporando tecnología para poder tener monitorizados a distancia a estos pacientes con dispositivos que nos permiten controlar su estado en tiempo real.
Otro aspecto clave, es las herramientas tecnológicas que podemos llevar al domicilio para la asistencia, bien sea de cara a pruebas diagnósticas como para los tratamientos.