En 1984 se creó la Sociedad Española de Medicina Estética. De entonces a esta parte, ¿cuáles han sido los principales cambios que ha vivido esta sociedad?
En sus comienzos, la medicina estética surge con los tratamientos de obesidad, celulitis y grasa localizada. A partir del año 2000 se incorporan los temas faciales, la alopecia y el rejuvenecimiento. En el avance de la medicina estética ha sido determinante que cada vez la población demanda más estos tratamientos debido a la mejora económica y al aumento de la esperanza de vida de la población. Como dato, en 2012, en una encuesta que realizamos sobre el uso de la medicina estética por la población, un 22% la había utilizado. Los últimos datos de 2016 muestran un incremento del 8%.
"En la actualidad, hay más de 10 universidades que imparten másteres de medicina estética"
Por otro lado, a nivel de los propios médicos, hemos pasado de una formación y conocimiento entre compañeros, y de un primer máster universitario en las Islas Baleares en el 98, a que en la actualidad haya más de 10 universidades que imparten másteres de medicina estética. Por último, en nuestros inicios no existíamos para las administraciones públicas. Luego surge la ley de ordenación de los centros sanitarios y aparece la medicina estética de manera específica. Actualmente estamos a la espera de que el Ministerio termine las gestiones empezadas con el diploma de acreditación avanzada.
¿Y en qué situación se encuentran los profesionales?
Cada vez hay más profesionales y la formación está muy regulada. Los colegios de médicos han creado diplomas de capacitación en base a unos baremos homogéneos en toda España, donde se valora la formación continuada, experiencia, publicaciones… Quien llega a la puntuación requerida, se le da dicho diploma.
En esta línea, estamos a la espera de que se lance el Diploma de Acreditación Avanzada específico para Medicina Estética, pero la situación política ha dejado este tema en stand by. Mientras tanto, los colegios de médicos están emitiendo diplomas a los formados.
El intrusismo es uno de los problemas a los que intentan hacer frente desde SEME, ¿en qué situación están las gestiones en estos momentos?
El tema del intrusismo es continuado y las autoridades no ponen énfasis en garantizar la seguridad de los pacientes.La legislación dice que sólo el médico está capacitado para hacer tratamientos médicos, sin embargo, continuamos recibiendo anuncios de personas no médicas que hacen actos médicos como, por ejemplo, tratar las manchas. Y no hay que olvidar que detrás de una mancha puede haber una patología maligna y esto tiene que valorarlo un facultativo.
"La legislación dice que sólo el médico está capacitado para hacer tratamientos médicos; sin embargo, continuamos recibiendo anuncios de personas no médicasque hacen actos médicos"
No obstante, continuamente vemos folletos donde se anuncian tratamientos para las machas, la eliminación de tatuajes, láser para quitar varices como si fueran sólo cuestiones meramente estéticas, cuando toda esta actividad requiere de un diagnóstico y de una valoración médica.En este sentido, estamos luchando, pero nos encontramos con un problema, y es que los centros no médicos no dependen del control de Sanidad, sino de Consumo, y es un círculo vicioso. Sanidad dice que no puede intervenir porque no es un centro médico y Consumo dice que él lo ha autorizado para hacer tratamientos de belleza, pero no para actos sanitarios y que tampoco es de su competencia en ese sentido. Finalmente, es el cliente el que queda desprotegido.
Ante esta situación, ¿qué consejos daría a una persona interesada en medicina estética?
Primero averiguar que el tratamiento que dan sea médico y que está realizado por facultativos. A su vez, el centro médico tiene que estar autorizado, no basta con que haya un médico. De esta manera, nos aseguramos de que el centro cumple con aspectos de seguridad. Luego, el médico que lleve a cabo la actividad debe tener experiencia y esto lo puede saber a través del colegio de médicos de su provincia y mediante referencias de otros conocidos que ya hayan ido.
¿Cuál es el futuro de la medicina estética?
Nos dirigimos hacia la regulación por parte de la Administración, ya que el consumo se va incrementando. De hecho, esperamos que de aquí a cinco años, un 50% de la población va a utilizar en algún momento la medicina estética, y la administración debe plantearse y tener muy claro que la regulación es muy necesaria para evitar intrusismo y mala práctica.
"La administración debe plantearse y tener muy claro que la regulación es muy necesaria para evitar intrusismo y mala práctica”
Queremos también autorregulación. Nosotros pensamos que es una actividad en auge que la población cada vez desea someterse más a tratamientos poco agresivos con resultados naturales y con poca recuperación. Por otra parte, es importante que se sepa que la medicina estética es preventiva, algo que cada vez atrae más a la población. No sólo quitamos arrugas, también indicamos cómo cuidar la piel para evitar problemas y prevenir futuras patologías.La medicina estética tiene un alto nivel preventivo.
En definitiva, para SEME es fundamental que la administración que vaya a venir continúe con la regulación a la que estamos a un paso. Queremos que, finalmente, el Ministerio de Sanidad y las comunidades desarrollen el diploma de acreditación avanzada.
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