El sexo oral podría ser el causante del aumento de casos de cáncer de garganta que se ha experimentado en las últimas décadas en Occidente. Concretamente, en países como Estados Unidos y Reino Unido. Así lo confirma un estudio de de la Universidad de Birmingham que ha señalado el crecimiento de cáncer orofaríngeo, un tipo de enfermedad muy específico que afecta especialmente a las amígdalas y a la parte posterior de la garganta.
El informe exhibe que ocho de cada 10 adultos ha asegurado haber practicado sexo oral en algún momento de su vida, los cuales tendrían 8,5 veces más probabilidades de desarrollar un cáncer de garganta. En España, este tipo de cáncer es uno de los países con una alta incidencia y se encuentro entre los 10 más diagnosticados, con unos 8.000 casos diagnosticados.
Entre las diferentes causas, la principal podría ser el virus del papiloma humano (VPH), que también puede provocar cáncer de cuello uterino. Esta infección de transmisión sexual (ITS) es la más común en la población. Es más según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (ECDC) “es tan común que casi todos los hombres y todas las mujeres sexualmente activos lo contraen en algún momento de su vida”.
"Ahora hay cada vez más pruebas, aunque todavía pruebas indirectas, de que la vacunación también puede ser eficaz para prevenir la infección por VPH en la boca"
Por eso, los investigadores consideran que “el sexo oral es ya el principal factor de riesgo de cáncer de garganta”. El Doctor Hisham Mehanna, principal autor de este escrito publicado en la revista ‘The Conversation’, explica que “la mayoría de nosotros contraemos infecciones por VPH y somos capaces de eliminarlas por completo. Sin embargo, un pequeño número de personas no son capaces de deshacerse de la infección, quizás debido a un defecto en un aspecto particular de su sistema inmunológico”.
En estos pacientes, el virus es capaz de replicarse continuamente y, con el tiempo, se integra en las posiciones aleatorias en el ADN del huésped, por lo que las células pueden volverse cancerígenas. Por eso, los investigadores insisten en la importancia de la vacunación: “la vacunación de los jóvenes contra el VPH se ha implantado en muchos países para prevenir el cáncer de cuello de útero. Ahora hay cada vez más pruebas, aunque todavía pruebas indirectas, de que también puede ser eficaz para prevenir la infección por VPH en la boca”.
Asimismo, detallan que “paradójicamente, existen algunas pruebas procedentes de estudios de población de que, posiblemente en un esfuerzo por abstenerse de las relaciones sexuales con penetración, los adultos jóvenes pueden practicar en su lugar el sexo oral, al menos al principio. Sin ser conscientes de que eso también supone un riesgo”.