El expresidente andaluz, José Antonio Griñán, podría no ingresar en prisión debido al cáncer de próstata que padece. Griñán estaría condenado a seis años y dos días de cárcel por malversación en el caso de los ERE.
Tal y como ha manifestado el informe forense, los posibles efectos secundarios en el tratamiento de este cáncer son una de las razones de la no conveniencia del ingreso en prisión. Según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), este cáncer es el segundo más diagnosticado en España en 2021, con casi 36.000 nuevos casos.
Asimismo, el de próstata es el cáncer más frecuente en hombres en España, con alrededor de 260.000 casos en 2020 y el quinto cáncer más mortal, con una tasa de fallecimientos del 5,1%.
El cáncer de próstata impacta en la salud mental en el paciente, por lo que el ingreso en prisión no favorecería a afrontar y sobrellevar la enfermedad
El informe de la forense del Instituto de Medicina Legal que analizó el caso del soialista califica el cáncer de próstata como “una enfermedad muy grave” que, en el caso de Griñán, presenta “posibilidades de curación”, aunque aún no es posible establecer cuál será la evolución de su pronóstico.
Además, el cáncer de próstata impacta en la salud mental en el paciente, por lo que el ingreso en prisión no favorecería a afrontar y sobrellevar la enfermedad. Al hilo, insiste en que el enfermo precisa de “todos los recursos disponibles que tiene a su alcance”, como pueden ser el apoyo de su familia, “necesario e incluso imprescindible en estos casos”.
Es por ello que el informe forense establece la “no conveniencia de ingreso en centro penitenciario hasta tanto se confirme la remisión de su patología oncológica”. Griñán ya ha comentado el tratamiento contra el cáncer y en tres días se determinará si, finalmente, ingresa o no en prisión.