El caso de la fecundación In Vitro "errónea" en el Hospital Puerta del Mar de Cádiz continúa en fases de investigación. Y es que, hace unos días se daba a conocer la noticia de que una familia denunciaba haber sufrido un "error" durante un proceso de reproducción asistida en el hospital gaditano. Por el momento, los datos que se conocen confirman que el pequeño no tiene los marcadores genéticos del padre y por lo tanto no es suyo.
La familia comenzó con el proceso de reproducción asistida en el año 2019. Dos años después, el matrimonio pudo someterse a la transferencia embrionaria que, finalmente, resultó existosa. El embarazo llegó a término y, hasta el momento habían sido "unos padres normales y felices", como explicó el abogado del matrimonio, Ignacio Martínez. El hallazgo se decubrió en febrero de este año, cuando la familia decidió someterse a una prueba de paternidad, debido a "los reiterados comentarios familiares de la falta de parecido físico entre el niño y su padre". El resultado de los análisis determinaron la peor de las noticias: que el menor no era hijo biológico del padre, aunque sí de la madre.
Por el momento, los datos que se conocen confirman que el pequeño no tiene los marcadores genéticos del padre y por lo tanto no es suyo
Este hecho, recalca el abogado, conlleva que hubo un error en la muestra de semen. En este sentido Martínez ha reiterado su desconociemiento sobre si es una situación "puntual" o "puede afectar a otros casos". Por su parte, la pareja reclama ahora 1 millón de euros como compensación por lo ocurrido.
El Servicio Andaluz de Salud ha querido también pronunciarse sobre este hecho, para aclarar las dudas surgidas en relación al protocolo del centro. Luis Martínez, director general de Asistencia Sanitaria y Resultados en Salud del Servicio Andaluz de Salud (SAS), ha descartado que "en estos momentos" haya más casos relacionados con fecundaciones in vitro "erróneas" realizadas en el Hospital Puerta del Mar de Cádiz y ha indicado que se está evaluando la trazabilidad del proceso y el cumplimiento de los protocolos establecidos para este tipo de intervenciones.
Por el momento, la investigación se encuentra en fases "muy preliminares" porque el proceso es "muy minucioso" para "no saltarnos ningún paso" y "no cometer errores en la trazabilidad", aunque se va a intentar esclarecer lo sucedido "lo más rápidamente posible". Así se ha explicado desde el servicio de salud.
OTROS CASOS EN EL MUNDO
Este error en la reproducción asistida no es el primero que se produce en España. De hecho, y como ha dado a conocer "Telecinco", una pareja de Las Palmas de Gran Canaria sufrió otro proceso de fecundación in vitro erróneo, en este caso, realizado en el Instituto Canario de Infertilidad (ICI). El propio Tribunal Supremo confirmó este error. Concretamente, el equipo médico utilizó una muestra equivocada y la mujer se quedó embarazada de gemelos de otro donante.
Asimismo, una pareja de San Isidro, Argentina, pudo comprobar, tras el alta de la mujer, que el grupo sanguíneo del hijo no se correspondía con los de él y su esposa y podía haber un error. Así, al practicarse una prueba de paternidad confirmaron que el bebé no era genéticamente compatible con la pareja y, de hecho, comprobaron que se trataba de un embrión que pertenecía a otra. El caso involucra a dos parejas que habían recurrido a la misma clínica de fertilidad.
Estos errores se dieron también en un caso de California, Estados Unidos. Otra pareja denunció a una clínica de fertilización después de otro error con la fecundación in vitro. Concretamente, una pareja de Glendale, ciudad del condado de Los Ángeles, llevaron a la clínica de fertilidad ‘CHA Fertility Center’ ante los tribunales por un error que llevó a una mujer de Nueva York a dar a luz al que era en realidad el hijo de ellos. La situación se produjo porque dos embriones fueron implantados en el útero de la residente de Nueva York, de origen coreano. En su momento, esta última esperaba tener gemelas, pero nacieron dos niños y no tenían rasgos asiáticos como ella y su pareja. Ello hizo sospechar del error.
También en Estados Unidos una pareja se percató de que su hijo carecía de unos rasgos en la pigmentación que sí poseen el padre, la madre y su primer hijo, por lo que comenzaron a realizarse pruebas para estudiarlo. Así, también en este caso, determinaron que el menor no estaba relacionado genéticamente con ellos, procediendo a una demanda.