El sueño de muchas personas, poder mantener la forma física sin necesidad de hacer deporte, está un pasito más cerca. Científicos han desarrollado una pastilla que, en el futuro, podría ofrecer algunos de los mismos beneficios que se obtienen con el ejercicio físico. La investigación, llevada a cabo y presentada por la Sociedad Química Estadounidense, de momento solo ha sido probada en roedores, pero con notable éxito.
Su objetivo, eso sí, no es eliminar el deporte. De hecho, recuerda Bagaa Elgendy, investigador principal del proyecto, el ejercicio no se puede reemplazar, puesto que es “importante a todos los niveles”. “Si puedo hacer ejercicio, debería seguir adelante y realizar actividad física”, señala Elgendy, perteneciente a la Washington University School of Medicine. Así, su pastilla está diseñada para esos casos en los que, por una u otra razón, no se puede. Principalmente, debido al envejecimiento.
"El ejercicio no se puede reemplazar, es importante a todos los niveles"
También, para gente que sufre de atrofia muscular u otras afecciones médicas, como insuficiencia cardíaca o enfermedades degenerativas, y para las que el ejercicio físico supone infinidad de beneficios. De hecho, el siguiente paso del investigador es recapitular los potentes efectos que tiene el ejercicio físico, como su capacidad para mejorar el metabolismo y el crecimiento de las células musculares, y analizar después cómo su pastilla podría contrarrestar la desaparición de estos efectos que se produce debido a las afecciones antes mencionadas, que impiden hacer deporte con regularidad.
Así, el equipo de Elgendy descubrió que su nuevo compuesto, administrado a los roedores, aumentaba un tipo de fibra muscular resistente a la fatiga, al mismo tiempo que mejoraba su resistencia cuando corrían por la cinta. Dicho compuesto desarrollado por los investigadores del otro lado del charco es la molécula SLU-PP-332, que logra ese aumento de la fibra muscular a través de la activación de unas proteínas relacionadas con receptores del estrógeno (ERR).
"Si tienes un compuesto que pueda activar de manera efectiva las proteínas receptoras del estrógeno, podrías generar muchos efectos beneficiosos"
“En todas estas condiciones, los ERR desempeñan un papel muy importante”, afirma Elgendy. "Si tienes una molécula que pueda activarlos de manera efectiva, podrías generar muchos efectos beneficiosos”, añade. De hecho, seguir estudiando los receptores ERR podría ser también bueno para combatir enfermedades como la obesidad, la insuficiencia cardíaca, el deterioro renal relacionado con la edad o problemas degenerativos, como el Alzheimer.
Además, señala el científico estadounidense, la pastilla también podría contrarrestar los efectos de otros fármacos, como los nuevos medicamentos para adelgazar que provocan la pérdida tanto de grasa como de músculo. Tanto él como su equipo esperan poder probar los nuevos compuestos en otros modelos animales a través de Pelagos Pharmaceuticals, una nueva empresa que han cofundado.